En el dia de hoy, nuestro pastor Pedro Guzman predica sobre la eleccion de los primeros diaconos en Hechos 6:1-7. El tiene tres puntos.
[0:00] Gracias. Los versículos del 1 al 7.
[0:32] Hechos, capítulo 6, los versículos del 1 al 7. Pienso que ya todos lo tienen.
[0:55] En aquellos días, como creciera el número de los discípulos, hubo murmuración de los griegos contra los hebreos de que las viudas de aquellos eran desatendidas en la distribución diaria.
[1:16] Entonces, los doce convocaron a la multitud de los discípulos y dijeron, No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios para servir a las mesas.
[1:33] Buscad, pues, hermanos de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, lleno del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo.
[1:46] Y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra.
[2:24] Vamos a orar, hermanos.
[2:40] Señor, tu palabra dice en Lucas, capítulo 24, versículo 45, que nuestro Señor Jesús le abría el entendimiento para que pudieran entender las Escrituras.
[2:55] Y eso mismo hoy te pido, Señor, que tú nos abras el entendimiento para que nosotros podamos entender lo que se va a predicar en el día de hoy. Para que nosotros podamos aplicar tu palabra que va a ser escuchada en el día de hoy, que va a ser predicada en el día de hoy.
[3:13] Siempre te pedimos, Señor, que nos quite cualquier preocupación, cualquier ansiedad, cualquier distracción. Que estemos enfocados, enfocados en la predicación de tu palabra, el escuchar tu palabra, tu palabra poderosa que transforma.
[3:31] Ayúdanos, Señor, porque dependemos de ti. Estamos unidos a Cristo. Cristo es la cabeza. Y separado de él no podemos hacer nada. Señor, en ti descansamos.
[3:43] En el nombre de Jesús. Amén. Todos nosotros tenemos prioridades en la vida. Todos los seres humanos tienen prioridades en la vida.
[3:55] Algunos, su prioridad es económica. Otros, su prioridad es salud mental. Otros, los amigos, los hijos, sus familiares.
[4:05] Y cuando nosotros somos niños, nuestros padres nos viven diciendo cuáles deben de ser nuestras prioridades. Yo recuerdo mis padres me decían, tú tienes que ir a la escuela.
[4:19] Tú tienes que terminar la primaria, la secundaria, ir a la universidad. Y después de eso te puedes casar. Tú te vas a casar. Y lo escuchaba constantemente. En la universidad nos decían cuáles eran nuestras prioridades.
[4:33] Y cuando nos graduamos, en los lugares de trabajo nos decían cuáles eran nuestras prioridades. En el caso mío, estando en un hospital, siempre nos decían cuál debe de ser la prioridad con relación a los pacientes.
[4:48] Si tenemos una gran cantidad de pacientes que llega a la emergencia, teníamos que darnos cuenta cuál era el paciente que tenía la prioridad de ser atendido. Y la prioridad de los seres humanos cambia y varía en diferentes maneras.
[5:06] Por ejemplo, recuerdo en ese tiempo que estaba en el hospital Moscoso Pueyo, que hubo una revuelta en el penal La Victoria.
[5:17] Hace muchos años de eso. Y en esta revuelta, los propios presos nos dijeron que había uno que tenía el control de todos los prisioneros.
[5:29] Exigía dinero, tenía negocios de vender comida, vender muchísimas cosas dentro de la prisión. Y él se hacía rodear de un grupo de presos para protección.
[5:41] Y él, su prioridad era el tener el control y recibir los beneficios económicos que le dejaban sus negocios dentro de la prisión. De alguna forma, un grupo contrario a él lograron separarlo del grupo que le brindaba protección.
[6:00] Y lo pudieron, por así decirlo, arrinconarlo en un lugar. Él no se podía mover hacia otro lado. Él tenía un alma y estaba peleando, defendiéndose.
[6:15] Pero le tenían tanto temor a él que no se acercaban a él. Y él estaba parado, esperándolo. Lo que idearon fue, esto está ocurriendo en una cárcel y algo verídico.
[6:27] Lo que se le ocurrió a ellos fue hervir agua, agua hirviendo, y se la tiraban. Y a él, defendiéndose del agua y tratando de defenderse de ellos, no pudo.
[6:39] Y ellos entonces se acercaron y le quitaron la vida. Y, imagínense, hubo una revuelta grande. Solamente en el hospital donde yo estaba, llegaron aproximadamente como, si mal no recuerdo, llegaron como 30 o 35 heridos en el hospital.
[7:00] Un hospital con cierta escasez de médicos. Imagínense lo que eso significó para nosotros. Y nos recordamos la prioridad. La prioridad que nos decían nuestros profesores tiene que tener prioridad.
[7:14] Tiene que identificar cuál paciente tiene prioridad. Y estábamos mirando, mirábamos los pacientes. Los que tenían herida en el tórax tenían prioridad. Los pacientes que estaban sudorosos, que la presión estaba bajita, tenían prioridad.
[7:30] Y el mundo vive, los seres humanos viven pensando en cuál debe de ser su prioridad. Cuál es la prioridad. Y pienso en los políticos, los gobernantes, que dicen, mi prioridad, sobre todo en nuestros países del tercer mundo, dicen, mi prioridad es, voy a acabar con la pobreza.
[7:55] Voy a acabar con las injusticias. Y precisamente ellos, podríamos decir que su prioridad es acabar con la pobreza, pero con la pobreza de ellos.
[8:06] El pueblo sigue en las mismas condiciones. Y nosotros, meditando y hablando de la prioridad, cuál debe de ser la prioridad de la Iglesia.
[8:17] Cuál debe de ser la prioridad de todos nosotros que hemos nacido de nuevo, en los cuales el Espíritu Santo mora en nosotros. Y precisamente, mis hermanos, eso es lo que vamos a ver hoy.
[8:32] Cuál es la prioridad de la Iglesia. Durante esta predicación, nosotros no vamos a dar cuenta cuál debe de ser la prioridad de la Iglesia de Cristo. Y vamos a ver hoy tres puntos, mis hermanos.
[8:42] El primer punto que vamos a ver es el descontento dentro de la Iglesia, la discordia dentro de la Iglesia. Ese sería el primer punto. El segundo punto que vamos a ver es la prioridad de la Iglesia.
[8:56] Nuestro punto principal, la prioridad de la Iglesia. Y el tercer punto, el crecimiento de la Iglesia. Yo creo que estemos enfocados en estos versículos, que estemos atentos en estos versículos, porque tienen mucha enseñanza para nosotros como Iglesia, para la Iglesia en el día de hoy.
[9:15] Y empieza en el versículo uno, dice, En aquellos días, como creciera el número de los discípulos, la Iglesia estaba creciendo. Esta primera Iglesia estaba creciendo.
[9:26] Y estaba creciendo precisamente porque se estaba predicando la palabra. El número de creyentes estaba aumentando. El número de personas que se estaban arrepintiendo de sus pecados y siguiendo el Evangelio de Cristo, iba en aumento.
[9:41] El reino de Cristo seguía y sigue avanzando. Pero, como siempre, cuando la Iglesia está avanzando, el enemigo no se queda con los brazos cruzados.
[9:54] El enemigo de las almas no se queda con los brazos cruzados. Y nosotros, nosotros pudimos ver esto en los versículos anteriores. Lo primero que ideó el enemigo, la persecución de la Iglesia.
[10:07] Acuérdense que Pedro y Juan estuvieron, fueron encarcelados. Fueron encarcelados y les prohibieron que predicasen o que hablasen en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.
[10:18] Pero esto no lo detuvo a ellos. Ellos siguieron predicando, predicando el Evangelio de Cristo, predicando el Evangelio de salvación. Esto no dio resultado. La Iglesia, inclusive en el tiempo, en estos momentos, hay la Iglesia, muchas Iglesias que están siendo perseguidas.
[10:35] Pero esto no impide el avance de la Iglesia. Esto no impide el avance del Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Y también vemos que otra táctica que el enemigo usa dentro de las Iglesias, nosotros vemos que muchas veces, lo vimos con Ananía y Zafira, que hay pecados ocultos dentro de la Iglesia.
[10:54] Hay pecados ocultos. Ellos le mintieron a Dios, le mintieron al Espíritu Santo, y Dios limpia y purifica su Iglesia y fueron quitados, fueron muertos inmediatamente.
[11:06] Primero uno y después el otro. Pero hay una forma muy efectiva que puede afectar a la Iglesia, que puede disminuir el avance de la Iglesia, que puede causar divisiones en la Iglesia.
[11:25] Y es el descontento dentro de la Iglesia. Es la murmuración dentro de la Iglesia. Es el desánimo dentro de la Iglesia.
[11:36] Es la discordia dentro de la Iglesia. Si nosotros vemos en el versículo uno, dice, en aquellos días, como creciera el número de los discípulos, hubo murmuración de los griegos contra los hebreos.
[11:56] Y aquí hay algo que nosotros necesitamos aclarar. ¿A quién se está refiriendo cuando dice que hubo murmuración entre los, de los griegos?
[12:07] Dice, hubo murmuración de los griegos contra los hebreos. Uno podría pensar así rápidamente, bueno, era que habían personas de Grecia que estaban murmurando contra los judíos. Pero no.
[12:18] Se está refiriendo aquí, mis hermanos, cuando dice, por eso quiero que presten mucha atención, cuando dice que hubo murmuración de los griegos contra los hebreos, se estaba refiriendo al mismo pueblo judío.
[12:30] Ahora, cuando habla de los griegos, cuando dice aquí de los griegos, se está refiriendo a judíos que fueron, que vivían en otras naciones.
[12:41] Acuérdense que el pueblo de Israel fue gobernado por muchos imperios. Asiria gobernó el pueblo de Israel y produjo una dispersión. Tomaban prisioneros y los llevaban a sus países.
[12:55] Babilonia hizo lo mismo. Tomó muchos del pueblo judío y se los llevaron a sus países. Grecia hizo también lo mismo. El imperio romano también hizo lo mismo.
[13:06] Entonces, esos judíos que crecían fuera de la nación de Israel asumían la cultura y la lengua de los países donde fueron llevados. Entonces, asumieron, muchos de esos judíos asumieron el griego como su lengua, como la lengua, el idioma que hablaban.
[13:24] Otra cosa que ayudó a esto fue que Grecia fue un imperio muy poderoso y cuando Alejandro Magno o Alejandro el Grande conquistaba una nación, él ofrecía ciudadanía y algunos beneficios a las personas que se fueran a vivir a esa nación.
[13:38] Y muchos de las naciones judías se iban a esas naciones para conseguir la ciudadanía, los privilegios de ser un ciudadano griego.
[13:51] Acuérdense también que el imperio romano derrotó al imperio griego, pero asumió la cultura griega. Por eso nosotros cuando hablamos decimos la influencia greco-romana.
[14:07] Ellos fueron muy influenciados del imperio. A pesar de que conquistó a Grecia, que conquistó todas las naciones que dominaba el imperio griego, ellos fueron influenciados por la cultura griega.
[14:19] Inclusive se consideraba en ese entonces que el idioma, el idioma de la sabiduría, el idioma de los inteligentes, quizá el idioma en muchas escuelas era el griego.
[14:35] Entonces, estos judíos, estos judíos que hablaban el griego, que crecieron en otras naciones, muchas veces se trasladaban de las naciones donde vivían, se iban a Israel para la celebración de las fiestas.
[14:51] Muchos se iban a vivir, después de vivir un largo tiempo, en naciones extranjeras, volvían de nuevo a la nación de Israel porque querían terminar sus vidas allá, querían morir allá.
[15:06] Y muchos pensaban que cuando ocurriera la resurrección, iba a empezar en la nación de Israel. Estos judíos entonces iban a sinagogas donde se predicaba en griego.
[15:21] Tenían una cultura, tenían una influencia greco-romana o griega bastante, bastante alta. Entonces, había en este momento, cuando fue que está señalando el libro de Hechos, habían dos tipos, podríamos decir, dos grupos, vamos a decirlo.
[15:39] Los judíos que hablaban el idioma griego, que tenían una cultura greco-romana, por así decirlo, ellos tenían, donde ellos se congregaban y ellos leían, leían su Biblia en griego, ellos en su sinagoga se predicaba en griego y estaban los judíos que se quedaron en la nación de Israel, que por algún motivo no fueron llevados a otras naciones, ellos se quedaron ahí en el área de Israel, en Jerusalén.
[16:11] Estos escuchaban las predicaciones en el idioma arameo o el hebreo, leían en ese idioma la predicación y ellos no tenían, mis hermanos, diferencias teológicas, no tenían diferencias teológicas grandes.
[16:29] Sí habían diferencias culturales y diferencias de idioma, porque unos se sentían cómodos con el griego y otros se sentían con su idioma natural, que era el arameo o el hebreo.
[16:48] Eso sucede, por ejemplo, con nuestros hijos. Nosotros hemos emigrado a esta nación, nuestros hijos nacen en esta nación y ellos se sienten más cómodos hablando inglés.
[16:59] Nosotros nos damos cuenta, todos los que tenemos hijos que han nacido aquí en Estados Unidos, ellos se sienten más cómodos hablando el idioma inglés. Hablan con nosotros en español, pero en verdad se sienten mucho más cómodos hablando el inglés.
[17:15] Entonces, ¿qué nos dice aquí en estos versículos, en este mismo versículo 1, ¿qué nos dice aquí? Hubo murmuración de los griegos contra los hebreos.
[17:29] Ya sabemos quién eran los griegos y quién eran los hebreos. Hubo murmuración. Y esto me detuvo un poco. Murmuración. Estaban murmurando, se estaban quejando, había descontento, había discordia entre este grupo de, de, de este grupo hebreo, este grupo de judíos que hablaban el idioma, el idioma griego, perdón.
[17:54] Hubo, hubo, había esa discordia entre ellos y busqué el significado de murmuración. Había murmuración. Estaban diciendo, y la causa de la murmuración era que ellos decían que las viudas de aquellos, de la, de la comunidad que hablaba el griego, eran desatendidas en la distribución diaria.
[18:18] La distribución de alimentos, en la distribución, quizá de ayudas económicas, ellos decían que era desatendidas. Y ellos estaban murmurando. Ellos se estaban quejando.
[18:31] Había un desencanto. Había un descontento entre ellos. Y, le decía a mis hermanos que busqué la definición de murmuración. Yo quiero que le presten atención a esto.
[18:43] Miren qué definición encontré. Murmuración es un pecado. Es un pecado que consiste en hablar mal de alguien o algo sin que la persona esté presente.
[18:57] Wow. Wow, mis hermanos. Yo lo voy a leer de nuevo, me disculpen. Murmuración es un pecado que consiste en hablar mal de alguien o algo sin que la persona esté presente.
[19:12] Y, mis hermanos, esta es la tercera forma que está usando el enemigo a esta iglesia para impedir el avance de esta iglesia, impedir que muchas personas se estén, se estén, se estaban convirtiendo, se estaban arrepintiendo de sus pecados y se estaban acercando a esta congregación.
[19:30] no le dio resultado la persecución de la iglesia. Juan, los discípulos, Pedro, siguieron predicando. No le dio resultado los pecados ocultos que habían en la iglesia, como Ananía y Zafira, le mintieron a Dios, le mintieron al Espíritu Santo.
[19:48] Y esta es la tercera forma y muchas veces, mis hermanos, esta tercera forma de ataque en la iglesia, muchas veces efectiva, lamentablemente. Se produce desencanto entre los hermanos, se produce desánimo.
[20:03] Hermanos que están murmurando uno de otro, mis hermanos, y tenemos que evitar esto. Tenemos que evitar esto en todo momento.
[20:16] Nosotros no podemos, no podemos dejar que el desánimo, el desencanto nos, nos, nos, sea parte de nosotros.
[20:29] Porque esto impide el avance del evangelio. Esto detiene el avance, el avance de la iglesia. Miren como dicen en Filipenses 2.14, hacer todos sin murmuraciones y contiendas.
[20:44] Quizás estos hermanos no se acercaron directamente, inmediatamente a los apóstoles y le plantearon, le plantearon la situación que estaban pasando o la situación por la cual ellos tenían descontento.
[20:59] Quizás nosotros tenemos algún descontento y no nos estamos acercando a los hermanos y le hemos dicho. Quizás nosotros tenemos desánimo y no estamos, no nos estamos acercando a los hermanos.
[21:13] quizás cuando viene alguien se acerca a nosotros a hablarnos de otro hermano, nosotros prestamos oído, mis hermanos, y no le decimos en lugar de decirle a ese hermano, no, ve, habla con el hermano y en amor traten de solucionar ese problema.
[21:29] Mis hermanos, es algo que le hace daño a la iglesia. Miren como dice en Proverbios 16.28, El hombre perverso levanta contienda y el chismoso aparta a los mejores amigos.
[21:45] Ellos estaban desencantados, tenían, estaban, estaban descontentos los judíos de habla, de habla, que hablaban el griego contra los judíos, descontentos contra los líderes de la congregación.
[22:02] Miren como dice en Santiago 4.11, 4.11 al 12 dice, Amados hermanos, estoy leyendo de la nueva traducción viviente, Amados hermanos, no hablen mal los unos de los otros.
[22:17] Esto es Dios hablando. Mis hermanos, no hablemos mal los unos de los otros. No caigamos en esa tentación. Dice, si se critican y se juzgan entre ustedes, oigan esto, esto es lo más grande, si se critican y se juzgan entre ustedes, entonces critican y juzgan la ley de Dios.
[22:36] Wow. Si nos criticamos entre nosotros, miren como dice que entonces critican y juzgan la ley de Dios. En cambio, les corresponde obedecer la ley, no hacer la función de jueces.
[22:51] Solo Dios quien ha dado la ley es el juez. Solamente Él tiene el poder para salvar o destruir. Entonces, ¿qué derecho tiene tú para juzgar a tu prójimo?
[23:01] Y nuestro Señor Jesucristo nos ha dicho, nos ha dicho la forma como nosotros podemos corregir a los hermanos. Si un hermano peca contra ti, si un hermano peca contra mí, nuestro Señor Jesucristo nos lo dice claramente en Mateo 18, 15.
[23:19] Si alguien peca contra mí, si yo siento que un hermano ha pecado contra mí, yo voy donde ese hermano y le digo lo que yo siento, le planteo, si el hermano no me hace caso, voy con un testigo la segunda vez.
[23:33] Si no me hace caso, entonces lo presento a la iglesia. Y si no escucha a la iglesia, entonces ese hermano va a ser tomado, va a ser tratado como un gentil republicano.
[23:47] Dios, en su palabra, nos deja la forma de cómo nosotros podemos acercarnos, cómo nosotros podemos vencer las diferencias que nosotros tenemos, pero vuelvo y le digo, lamentablemente esta tercera forma de ataque es muy efectiva y destruye las iglesias y pide el avance del evangelio de las iglesias.
[24:07] Entonces, la segunda parte, todavía estamos en el versículo 1, la segunda parte del versículo 1 dice, mire de qué la queja era, mire de qué se estaban quejando, dice, de que las viudas de aquellos eran desatendidas en la distribución, en la distribución diaria, la distribución diaria, ellos, ellos se estaban, se estaban quejando de esto, parece que ellos veían como cierta preferencia o cierto beneficio mayor en las, en las viudas hebreas que en las viudas, vamos a decirlo así, que hablaban el griego y si había un grupo, un grupo de personas que necesitaban ayuda verdaderamente, eran las viudas, era una tragedia, era una desgracia, una mujer viuda, sobre todo si no tenía, si no tenía hijos, era algo bien, bien, bien, bien difícil para sobrevivir, para sostenerse y la iglesia de ese tiempo, la primera iglesia, había determinado ayudar a las viudas, ayudar a los huérfanos, ayudar al extranjero, extranjero, miren como dice en, en primera de Timoteo, capítulo 5, versículo 1, honra a la viuda que en verdad lo son, eh, y la iglesia tenía una forma de colectar ofrendas, de colectar alimentos, los viernes en la mañana ellos colectaban ofrendas y colectaban alimentos, entonces, las personas que necesitaban una ayuda temporal, se le entregaba esa ayuda, las personas eso lo hacían el viernes en la tarde, las personas que necesitaban una ayuda permanente, entonces, se lo daban todos los viernes en la tarde y la cantidad que le daban correspondía a dos comidas por día, ya sea en comida, ya sea en ayuda monetaria, lo que le daban correspondía más o menos a dos comidas, a dos comidas por día, o sea, le daban todos los viernes, le darían entonces catorce raciones, ya sea en alimentos, ya sea en ayuda económica, pero entonces, miren lo que dice los apóstoles, los apóstoles se enteraron de la situación, se enteraron de la situación de descontento que había, y miren lo que hicieron ellos, dice en el versículo número dos, entonces los doce, aquí se está refiriendo a los doce apóstoles, convocaron a la multitud de los discípulos, convocaron a todos los discípulos, a todos los que se habían arrepentido, a todos los que habían puesto su confianza en nuestro Señor
[26:47] Jesucristo, y dijeron, oigan lo que dijeron ellos, no es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios para servir a las mesas, y esto tiene, esto es precioso, la palabra de Dios es preciosa, dice que no es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios para servir a las mesas, cuando habla aquí de servir a las mesas se refiere precisamente a la distribución de alimentos, a la distribución monetaria, que ellos se ocupen más, ellos decían no es justo que nosotros descuidemos la predicación de la palabra para nosotros dedicarnos a las labores de distribuir los alimentos, de distribuir las ayudas económicas, y nosotros recordamos en los versículos anteriores, sobre todo en el capítulo 4, que nos dice que cuando los miembros de la iglesia vendían algunas pertenencias, cuando ellos vendían algo que llevaban el dinero, y decía textualmente que lo entregaban a los apóstoles, pero la iglesia había crecido demasiado, la iglesia había crecido mucho, muchas personas se estaban arrepintiendo, muchas personas estaban buscándose el miembro de la iglesia, muchas personas, el evangelio lo había transformado, el evangelio lo había cambiado, y había aumentado la responsabilidad, imagínense toda la responsabilidad que tenían los apóstoles, tenían la predicación de la palabra, tenían que dar consejería, tenían que la santa cena, organizar la santa cena, si había algún problema en la iglesia, ellos tenían que estar pendientes, y miren lo que ellos hicieron, entonces, bajo la guía del Espíritu Santo, ellos convocaron a toda la iglesia, convocaron a toda la iglesia, de una forma democrática, no se impusieron, ellos no impusieron lo que ellos creían, lo que ellos pensaban, lo que ellos pensaban que era la solución, lamentablemente en estos tiempos hay muchas iglesias donde los líderes imponen sus ideas, los líderes muchas veces no consultan a la iglesia, pero, y gloria a Dios que nosotros no somos ese tipo de iglesia, le doy la gloria a Dios por esto, miren lo que ellos hicieron, no lo dice, ellos convocaron a la multitud, y miren como dice en el versículo 3, buscad pues hermanos de entre vosotros, buscad de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encargaremos, encarguemos de este trabajo, los discípulos, los apóstoles dijeron, miren, van a buscar a siete hombres, siete varones, y dijeron cuál característica tenía que tener esos hombres para que se encargaran de ese problema que estaba afectando la iglesia, buscaron una decisión, buscaron una solución rápida bajo la guía del Espíritu Santo, y cuál era la característica brevemente hay que decirlo, de la característica de esos varones, porque pienso que es importante para la iglesia, pienso que es importante para nosotros, nos puede ayudar en el momento de nosotros elegir diáconos, elegir líderes en la congregación, es importante que veamos lo que nos dice la Biblia, una de las características que tenían que tener esos varones dice, hermanos de entre vosotros, o sea, no podía ser una persona fuera de la congregación, no podía ser una persona que viviera en otro lugar, no podía ser una persona ajeno a la congregación, muchas iglesias, lamentablemente, y lo digo con pena, muchas iglesias, perdón, mandan pastores de otro lugar, muchas tienen asociaciones, y muchas veces cuando una iglesia necesita un pastor
[30:48] o necesita un líder en la iglesia, ellos, no recuerdo el nombre, ellos tienen tan asociadas a las iglesias, tienen un nombre, una asociación que tienen, y ellos determinan cuál pastor va a ir a esa iglesia, cuál líder va a ir a esa iglesia, y no es una decisión que es tomada dentro de las iglesias, y por eso es que nosotros tenemos que escudriñar la palabra, por eso es que tenemos que escudriñar la Biblia, miren cómo está diciendo, buscar pues hermanos de entre vosotros, nosotros no podemos buscar un diácono que venga de otra iglesia, de otra congregación, y ponerlo aquí como diácono, tiene que ser buscar dentro, hermanos, dentro de vosotros, esa fue la primera característica que ellos, la primera condición que ellos exigieron, la segunda condición fue siete varones, aquí está diciendo claro, ahí no hay duda mis hermanos, dice que busquen siete varones, ya sabemos dos características, y otra característica que ellos piden, que tengan un buen testimonio, no puede ser cualquier persona, para solucionar un problema de la iglesia, los líderes, no puede ser cualquier persona, tiene que ser una persona que tenga un buen testimonio, y nos dice algo más, sigue diciendo, además de buen testimonio, llenos del
[32:03] Espíritu Santo, hermanos que estén llenos del Espíritu Santo, wow, y que significa eso mi hermano, llenos del Espíritu Santo, significa hermanos que sean guiados por el Espíritu Santo, hermanos que apliquen la palabra de Dios en su vida, no puede ser cualquier persona, miren como nos dice Efesios 5, 18, no os embriagueis con vinos, con vino, perdón, no os embriagueis con vino, en lo cual hay disolución, antes bien ser llenos del Espíritu Santo, entonces, como yo soy lleno del Espíritu Santo, como yo me puedo la llenura del Espíritu Santo, bueno, estudiando su palabra, meditando en su palabra, aplicando su palabra en mi vida, esa es la llenura del Espíritu Santo, si tú quieres ser lleno del Espíritu Santo, empieza a estudiar la Biblia, memorízate el versículo, aplica la Biblia a tu vida, esa era otra de las características que ellos exigían, que tengan un buen testimonio, lleno del Espíritu Santo y de sabiduría, esta es otra de las características, personas, hermanos que tengan sabiduría, entonces, seguimos en la palabra, un hermano tiene sabiduría, ¿cómo nosotros determinamos esto?
[33:23] El principio de la sabiduría es el temor a Jehová, entonces, una persona que tenga un temor reverente por Dios, es una persona que tiene sabiduría y eso fue la característica que ellos pidieron y entonces, para encargarlo de ese trabajo en la distribución de los alimentos, en la distribución de las ayudas monetarias y ese sería el primer punto, el punto número uno, el disgusto en las iglesias y vamos a ver entonces el punto número dos, la prioridad de la iglesia, cuál debe de ser la prioridad de la iglesia, cuál debe de ser la prioridad de todos nosotros, cuál debe de ser la prioridad de los ancianos, de los pastores dentro de la congregación y el versículo número cuatro nos dice esto, miren cómo dice el versículo cuatro, quizás el versículo más, yo siento que es uno de los versículos, o el versículo más importante de estos siete que estamos leyendo, dice, y nosotros, estos son los apóstoles hablando, y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra, wow, nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra, entonces ya nosotros sabemos que la prioridad de la iglesia, la prioridad de los ancianos, de los pastores, tiene que ser la predicación de la palabra y la oración, wow, y esto nosotros lo estamos viendo aquí en la palabra de Dios, los apóstoles, ellos entendían que fueron llamados a predicar la palabra y a la oración, ellos entendían esto y por eso ellos dijeron, le dijeron, se acuerdan en el versículo anterior, no es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios para servir a las mesas, no es que no sea importante, no es súper importante que la iglesia ayude a los hermanos que tienen una necesidad, es muy importante, de hecho, de hecho, es tan importante que hay hermanos dedicados también para esa función, hermanos que están pendientes de esa función, es importante, pero lo más importante para la iglesia es la predicación de la palabra y la oración, lo más importante para los líderes de la iglesia que deben de entender es que lo más, la prioridad, la prioridad es la palabra que estaba, que quiero usar, la prioridad de la iglesia debe de ser la predicación y la oración, la enseñanza de la palabra, la predicación de la palabra y es muy importante, es muy importante esto, tenemos que orar, orar por las necesidades de la iglesia, mis hermanos, nosotros agradecemos las oraciones que la iglesia está haciendo, sin sus oraciones, sobre todo primero, sin la ayuda del Espíritu Santo, le pido perdón a Dios por eso, sin la ayuda del Espíritu Santo, sin las oraciones de ustedes, mis hermanos, nosotros no pudiéramos pararnos aquí de frente a predicar la palabra, no pudiéramos, necesitamos que continúen orando, necesitamos que continúen intercediendo por nosotros, porque es una labor que demanda mucho tiempo, lo hacemos con gozo, es una labor de algo de mucho sacrificio y vuelvo y lo repito, lo hacemos con gozo porque lo estamos haciendo para el Señor y estos apóstoles, ellos entendieron esto, que lo más importante de la iglesia era predicar su palabra, enseñar su palabra, predicar en todo momento,
[37:14] Pablo le decía a sus discípulos predicate en todo tiempo, en todo momento, la oración, tenemos, esto es la prioridad que nosotros tenemos, volviéndole a decir mis hermanos, las necesidades que tienen los hermanos es importante, pero no es la prioridad, la prioridad de la iglesia ya sabemos cuál es, entonces, como le decía, nosotros necesitamos tiempo, necesitamos que la iglesia como un cuerpo ore, ore por esto, por esta prioridad que nosotros tenemos, pero, a cuál palabra se refiere cuando dice, y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra, ese es en el capítulo, en el versículo 4, y en el versículo 2 dice, entonces, dice, que no es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios, pero a cuál palabra se está refiriendo, a cuál palabra se está refiriendo, y es a la predicación de la palabra, la palabra de Dios, la predicación del evangelio de Cristo, esta palabra, esta palabra que nos ha transformado a todos nosotros, el poder que tiene la palabra de Dios, la necesidad prioritaria de la humanidad es que necesitan a nuestro Señor
[38:33] Jesucristo, esa es la principal necesidad del mundo, el mundo está como está, el mundo está vuelto un desorden, un desastre, donde a los malos le llaman buenos y a los buenos le llaman malos, donde nosotros vemos naciones como que no tiene sentido, no tiene luchando, miren este conflicto que hay entre Rusia, Ucrania, la OTAN, es un desastre, miren lo que está pasando en el Medio Oriente, todo este desastre, mis hermanos, el problema del mundo es que el mundo necesita a Cristo, el mundo necesita un Salvador, entonces, si ese es el principal problema, entonces, la prioridad de la iglesia debe de ser la predicación de la palabra, debe de ser la predicación de la palabra seguido de la oración, porque lo que nos transformó a nosotros, lo que transformó mi corazón endurecido por el pecado, fue la predicación de la palabra, la fe viene por escuchar, escuchar la palabra de Dios, cuando nosotros escuchamos la palabra de Dios, por el poder del Espíritu Santo, nuestro corazón es transformado y nosotros vemos la grandeza de Cristo, no veíamos la grandeza de Cristo, no entendíamos, decíamos que los cristianos son locos, pero cuando Dios transforma nuestro corazón somos una nueva criatura, nosotros nacemos de nuevo y esa es la prioridad, la predicación de la palabra, la predicación de la palabra, la predicación de la palabra en todo momento, en todo tiempo, a cada momento, a cada tiempo, entonces, si nosotros tenemos, si esa es la prioridad, nosotros tenemos que hacer esto, y la Biblia nos lo está enseñando, lo estamos viendo aquí en su palabra, miren lo que dice
[40:16] Albert Moller, me pareció muy buena idea traerlo a la congregación, miren que dice Albert Moller, y prestenle atención a esto, mis hermanos, porque esto es un comentario de Albert Moller, él dice, del libro de Hechos, dice, solo cuando una iglesia predica y enseña fielmente las escrituras, oigan esto, solo, empieza diciendo, solo cuando una iglesia predica y enseña fielmente las escrituras, y luego, suplica al Espíritu Santo que bendiga sus esfuerzos, puede ver verdadero, verdaderas conversiones, y verdadero crecimiento en la piedad del pueblo de Dios, wow, wow, mis hermanos, cuando yo vi, leí esto, digo, wow, pero esto es grandioso, solamente cuando la iglesia predica fielmente las escrituras, nos paramos aquí a predicar la palabra de Dios, no agregarle, no a decirle un sueño que tuve, o no, no, no es la palabra de Dios, porque eso es lo que va a transformar los corazones, eso es lo que el mundo necesita, y esa es la prioridad de la iglesia, y debe de ser la prioridad de todos nosotros, la predicación de la palabra, dice, y sigue diciendo él, la iglesia es creada por la palabra de Dios, oigan lo que está diciendo mis hermanos,
[41:36] Albert Moller, la iglesia es creada por la palabra de Dios, y sostenida por la palabra de Dios, lo que sostiene la iglesia es la palabra de Dios, lo que creó la iglesia es la palabra de Dios, dice, de hecho, una iglesia sin la palabra de Dios, oigan esto, una iglesia sin la palabra de Dios deja de ser iglesia, una iglesia sin la palabra de Dios deja de ser iglesia, lamentablemente mis hermanos, hay muchas iglesias que no son iglesia, hay muchas iglesias donde no se predica la palabra de Dios, o donde la palabra de Dios ocupa un segundo lugar, o un tercer lugar, lamentablemente y lo digo con mucha tristeza, con mucha pena, donde se busca predicar un evangelio que no ofenda, donde se busca predicar un evangelio suave, un evangelio porque muchas veces dicen, no, no puedes predicar eso porque los hermanos no van a venir a la iglesia, los hermanos se van a ofender o se van a sentir mal, mis hermanos, nosotros no vamos a mantener fiel a la predicación de la palabra, ustedes pueden estar seguros, con la ayuda del Espíritu Santo, con la ayuda de Dios, que nosotros no vamos a mantener fiel a la palabra de Dios, nosotros queremos que haya muchas personas en la iglesia, invitamos las personas, para la gloria de Dios queremos que vengan personas, que la iglesia esté llena de personas, pero sobre todo nosotros queremos que la iglesia esté llena de Cristo, y por eso nosotros nos vamos a mantener fielmente predicando la palabra de Dios, miren como sigue diciendo entonces en el versículo 5 y en el versículo 6, dice, agradó la propuesta a toda la multitud, oigan, le agradó la propuesta que ellos hicieron, vamos a buscar siete varones llenos del Espíritu Santo que tengan buen testimonio, temerosos de Dios, y agradó la propuesta, pero ustedes pueden estar seguros que los apóstoles cuando llevaron esta propuesta a la iglesia oraron, buscaron la guía del Espíritu Santo, buscaron que el Espíritu Santo lo guiara para tomar esta decisión, y se lo presentaron a la iglesia, a la iglesia les gustó, les gustó, dice que agradó la propuesta y eligieron, miren a quienes eligieron, eligieron a Esteban, varón lleno de fe y del Espíritu Santo, eligieron también a Felipe, a Procuro, a Nicanor, a Timón, a Palmeras y a Nicolás
[44:19] Prosélito de Antioquía, y lo bueno de esto, mis hermanos, para que ustedes vean, que todos estos que ellos eligieron eran precisamente de los judíos que hablaban griego, los hermanos que hablaban arameo, hebreo, los hermanos que se mantuvieron en Jerusalén en Israel, ellos, durante la votación, ellos votaron por todo, todo lo que votaron por los nombres, muchos teólogos dicen que ellos eran de origen, eran de los judíos que hablaban griego, o sea, no hubo envidia, no hubo, o vamos a poner tres de esto y tres de esto para que haya un equilibrio, no, ellos lo eligieron a ellos, porque quizás uno de los problemas del descontento era un problema también quizás de comunicación que no se podían comunicar bien, los hermanos que estaban encargados de la distribución, quizás no se podían comunicar bien, los hermanos judíos que hablaban en el arameo, no se podían comunicar bien con los hermanos que hablaban el griego, entonces, y ellos por eso, la iglesia de una forma sabia, guiada por el Espíritu Santo, entonces, ellos eligieron, a todos los que eligieron eran de origen griego, de estos hermanos, de estos hombres que la iglesia eligió, nosotros vamos a ver en el próximo domingo de Esteban, un varón lleno del Espíritu Santo, vamos a ver mucho de Esteban, de estos también podríamos decir del último que ellos eligieron de Nicolás,
[45:54] Nicolás que fue el último, sí, y Nicolás, este no era judío, pero él se arrepintió, él se convirtió al judaísmo, y posiblemente algunos teólogos dicen que en Apocalipsis 2, en el capítulo 2, versículos 6, hay un comentario como si él fuera el fundador de los Nicolaitas, hay algunos que dicen que sí, otros dicen que no, y hay un comentario no muy bueno de los Nicolaitas en Apocalipsis, ustedes lo pueden buscar, después Apocalipsis capítulo 2, el versículo, el versículo 6, entonces seguimos mis hermanos, vamos ahora entonces a pasar al punto número 3, el crecimiento de la iglesia, miren que, que pasó en el versículo 7, dice, y crecía la palabra del Señor, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén, también muchos de los sacerdotes obedecían a la fe, la palabra del Señor, la predicación de la palabra, que es lo que estaba produciendo el crecimiento de la iglesia, era la predicación de la palabra, fiera a la palabra, porque ellos entendieron cuál era la prioridad de la iglesia, cuál era su prioridad, que era la predicación, y miren como dice que el número de los discípulos se multiplicaba grandemente, estaba creciendo grandemente, porque ellos se mantuvieron fiel a la predicación de la palabra, inclusive dice que sacerdotes obedecían a la fe, muchos sacerdotes que servían en el templo, que eran hostiles a las enseñanzas de Cristo, dice que ahora se estaban convirtiendo, se estaban siguiendo el Evangelio de Cristo, se estaban haciéndose discípulos, discípulos del Señor, entonces mis hermanos, nosotros hemos visto en el día de hoy tres puntos, el primer punto vimos el descontento en la iglesia, el desánimo, discordia, murmuraciones en la iglesia, nosotros vimos lo dañino que puede ser esto, en el punto número dos vimos la prioridad y ya todos sabemos cuál es la prioridad de la iglesia, y en el punto número tres, el crecimiento de la iglesia, que nosotros vamos a aplicar como iglesia, cuáles cosas nosotros nos vamos a llevar en estos versículos que nosotros hemos visto, cuáles cosas nosotros nos llevamos, si hay cualquier desánimo, mis hermanos, si hay cualquier descontento, busquemos la forma bíblica de cómo enfrentar esa situación, cualquier descontento, cualquier desánimo, busquemos qué nos dice la palabra y hagamos las cosas de acuerdo a como la Biblia nos dice que la hagamos, si algún hermano se acerca con murmuraciones para murmurar, en amor vamos a decirles hermano, no mi hermano, ve solución a eso con tu hermano, en amor trata de buscar una solución, pero no le prestemos atención, no le prestemos oídos cuando haya algún hermano que se acerque con intenciones de murmurar.
[49:12] Otra cosa de la aplicación, nosotros estamos viendo cuáles son las formas que el enemigo ataca a la iglesia, nosotros vemos las persecuciones, quizás nosotros, quizás no sabemos, eso solamente lo sabe Dios, yo estoy diciendo una opinión como un pecador que soy, quizás nosotros no vamos a sufrir persecución, quizás esta iglesia no va a sufrir persecución, pero pueden haber pecados que afectan a la iglesia, pidámosles al Señor, vamos a pedirle al Señor, puede haber también algún desánimo, algún descontento, pidámosles al Señor y tratemos de solucionarlo de una forma bíblica.
[49:47] Nosotros vemos que la prioridad de la iglesia es la predicación de la palabra, es la predicación de la palabra, es la prioridad de la iglesia, la prioridad de nosotros, los ancianos, los pastores, es la predicación de la palabra.
[50:02] Nosotros necesitamos la oración, nosotros necesitamos orar por las necesidades de la iglesia, orar para que nos ayude en la predicación de la palabra, pero nosotros necesitamos que la iglesia ore, como lo están haciendo, mis hermanos, porque es un trabajo que requiere mucho tiempo, es un trabajo que sin la ayuda del Espíritu Santo, sin sus oraciones, no es posible.
[50:27] Y en nombre de los pastores, quiero aprovechar rápidamente y darle gracias por los hermanos que día a día oran por nosotros, oran por la iglesia. Quiero también, quizás sea una forma, no sé si sea una forma de aplicación o no, pero hay que darle gracias y pedir por esta iglesia, porque, mis hermanos, con la ayuda de Dios, con la ayuda del Espíritu Santo, estamos haciendo las cosas, o vamos a decirlo, estamos tratando de hacer las cosas de acuerdo a cómo está escrito en su palabra.
[51:02] No somos perfectos, somos pecadores que necesitamos la misericordia de Dios, pero nos esforzamos, con la ayuda del Espíritu Santo, a tratar de hacer las cosas como dice la palabra.
[51:14] Pero ahora bien, la prioridad de la iglesia, pero ¿cuál debe de ser la prioridad tuya? ¿Cuál debe de ser la prioridad de los miembros de esta congregación?
[51:25] Lo mismo. Predicar la palabra y ayudar al necesitado. Si nosotros, si nosotros, si nuestro Señor Jesucristo hizo un resumen de los mandamientos en dos, amar a Dios sobre todas las cosas y amar al prójimo como a ti mismo.
[51:48] Nosotros, ¿cuál debe de ser la prioridad tuya, como cristiano, como persona que ha nacido de nuevo? Tu prioridad tiene que ser lo mismo. Predicar el Evangelio en todo momento, en todo tiempo, siempre que tenga la oportunidad predicar el Evangelio en tu trabajo, con tus amigos, con tus familiares.
[52:05] Y si hay un hermano que tiene alguna necesidad, que tiene alguna ayuda, tú tienes que ayudar a ese hermano. Nosotros todos los cristianos estamos llamados a predicar el Evangelio. Dentro de la iglesia, la predicación de la palabra, los ancianos tienen la responsabilidad, pero fuera, nada te detiene a ti de predicar la palabra, de predicar el Evangelio, de en todo momento predicar el Evangelio.
[52:29] Y miren, mis hermanos, miren la importancia de la predicación de la palabra. Con nosotros está el hermano Ramón, un hermano anda con su esposa, con su hija, con su familia.
[52:42] Este hermano vive en Suiza y este hermano inició, vamos a decir, un estudio bíblico. Él en Suiza y los demás, los demás, la persona con la cual él inició el estudio bíblico, estaban residiendo aquí en Estados Unidos y empezaron, empezó ese estudio bíblico y ya van cuatro hermanos que iniciaron ese estudio bíblico que han sido bautizados aquí en la congregación y precisamente uno de esos hermanos que que se han beneficiado, se han beneficiado de ese estudio bíblico que nuestro hermano Ramón inició para la gloria de Dios, no para su gloria.
[53:29] Uno de esos beneficiaron de nuestra hermana Grianne y va a decir Grinelsi, me van a hablar Grianne y Grianne va a ser bautizada en el día de hoy y nosotros, ¿qué nosotros vemos con esto, mis hermanos?
[53:46] Nosotros vemos la importancia de la predicación de la palabra, de predicar la palabra en todo momento, en todo tiempo. Él, como miembro de su iglesia local en Suiza, él aconsejó aconsejó a estos hermanos, le dijo, miren, si ustedes van a visitar una iglesia, recomendó que viniera a la iglesia, a esta iglesia.
[54:06] Él buscó información, consiguió información y le recomendó que vinieran aquí y miren ya, Grinelsi, Anthony, Yosenef, Vilma, han sido bautizados con algo que empezó desde Suiza y hoy, en el día de hoy, Grianne va a ser bautizada, mis hermanos.
[54:25] Ese es el poder de Dios, fiel a la palabra. El hermano Ramón entendió que su prioridad es la predicación de la palabra. Esto es para la iglesia.
[54:37] Ahora, si tú estás aquí y tú no eres creyente, tu prioridad es arrepentirte de tus pecados y poner tu confianza en nuestro Señor Jesucristo. Si tú estás aquí por primera vez, tú tienes que arrepentirte de tus pecados, confiar en nuestro Señor Jesucristo como tu Señor y como tu Salvador.
[54:57] Si quieres que al final nosotros hablemos contigo, si quieres conocer más del Evangelio de Cristo, el Evangelio de salvación, el Evangelio de regeneración, puedes acercarte a cualquiera de los líderes de la congregación.
[55:11] Mis hermanos, vamos a orar. Señor, te damos gracias por tu palabra, te damos gracias porque hemos aprendido, Señor, que la prioridad es la predicación y la oración y te damos gracias por eso.
[55:28] Señor, ayúdanos a aplicar todas las cosas que hemos aprendido en el día de hoy a través de tu santa palabra. Gracias, Señor, en el nombre de Jesús. Amén. Amén.