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[0:00] Saludos.

[0:22] Saludos, mis hermanos. Saludos.

[0:53] Saludos. Vamos a dar unos cuantos minutos para que lo tengan.

[1:04] Hechos capítulo 25.

[2:07] Saludos.

[2:38] Saludos. Saludos. Saludos. Saludos. Saludos. Saludos. Saludos. Saludos. Saludos. Saludos. Saludos.

[2:49] Saludos. Saludos. Saludos. Saludos. Saludos. Saludos. Saludos. Subir a Jerusalén y allá ser juzgado de estas cosas.

[3:00] Delante de mí, Pablo dijo, ante el tribunal de César estoy, donde debo ser juzgado. A los judíos no les he hecho ningún agravio, como tú sabes muy bien.

[3:16] Porque si algún agravio o cosa alguna digna de muerte he hecho, no rehúso morir. Pero si nada hay de las cosas que estos me acusan, nadie puede entregarme a ellos.

[3:29] A César apelo. Entonces, Festo, habiendo hablado con el consejo, respondió, a César has apelado, a César irás.

[3:43] Vamos a orar, hermanos. Amantísimo Padre, Dios Todopoderoso, Dios Creador del Universo, Dios Creador de todo, absolutamente todo lo que existe.

[4:04] El Dios que está en control, que sostiene el Universo. Estoy aquí hoy, delante de ti, con la responsabilidad de predicar tu palabra.

[4:17] Te pido que me guíes, que me ayudes, que me asista, en todo tiempo, en todo momento. Sabemos que se levantan oposiciones cuando se va a predicar tu palabra.

[4:30] Vienen distracciones, vienen preocupaciones, cosas pendientes. Quítanos todas esas distracciones, todas esas cosas que no quitan la atención, que no quitan el estar concentrado en ti, en tu palabra.

[4:45] Necesitamos de ti, Señor. Ayúdanos a estar enfocado, a estar pendiente, porque es palabra de vida. Palabra que salva, palabra que transforma.

[4:55] Muchos aquí presentes necesitamos, todos necesitamos, no muchos, todos necesitamos de estas palabras. Y por eso te pido, Señor, que tu Espíritu Santo venga con poder y use esta palabra para transformar los corazones, para que nosotros podamos ver la luz de nuestro Señor Jesucristo, en el nombre de Jesús. Amén.

[5:17] Mis hermanos, es un honor grandísimo estar aquí predicando la palabra del Señor. Señor, es un privilegio inmerecido. Estamos aquí por la gracia de Dios, por la misericordia de Dios.

[5:35] Separado de Él nada, absolutamente nada podemos hacer. El número de cristianos en el mundo ha aumentado, superando los 2.400 millones de seguidores.

[5:48] 2.400 millones. Y proyectándose alcanzar los 3.000 millones para el 2050. Este crecimiento se observa en países, sobre todo, este crecimiento se observa, sobre todo porque ha habido un crecimiento en países como China, la India e Indonesia.

[6:12] Acuérdense que Indonesia es uno de los países con mayor cantidad de musulmanes. Pero a pesar de este crecimiento, en naciones como Estados Unidos, donde nosotros estamos viviendo, y en Europa, no ha habido crecimiento.

[6:27] Es por el contrario. Ha habido una reducción del número de creyentes que creen en nuestro Señor Jesucristo. De cada 3 cristianos, 2 de ellos viven en África, Asia y América Latina.

[6:44] En América Latina también se está viendo un crecimiento del número de los cristianos. En África, más de 750 millones de personas se identifican como cristianos, como creyentes.

[6:56] Y en Asia, alrededor de 416 millones. Antes, Europa tenía la mayor cantidad de personas que se confesaban como cristianos o creyentes.

[7:08] Y se calcula que en el 1900, había en Europa alrededor de 380 millones de cristianos. Pero estos números se están disminuyendo alarmantemente.

[7:23] Para el 2050, África podría albergar más de 1.200 millones de cristianos. Y Asia, alrededor de 600 millones de cristianos.

[7:35] Hay alrededor de 2.400 millones de cristianos. Musulmanes, hay 1.400 millones. Sin religión, hay 1.200 millones.

[7:49] Que practican el hinduismo, hay 1.200 millones. El budismo, hay 535 millones. Y el judaísmo, de 15 a 18 millones.

[7:59] ¿Qué impide el avance del cristianismo? ¿Qué impide el avance? Estas son algunas informaciones que pude obtener de la inteligencia artificial.

[8:15] Dice, el miedo. El miedo impide el avance del cristianismo. ¿Miedo a qué? Miedo a las persecuciones.

[8:26] Miedo a temer, temor a la aceptación social. Muchas veces pensamos, bueno, si predico el evangelio voy a ser rechazado. El temor a perder a los amigos.

[8:39] Todo esto está en primer lugar. En segundo lugar, la falta de fe y duda. Algunas personas dudan del poder del evangelio. Algunas personas dudan de que esa palabra que van a predicar va a transformar los corazones.

[8:55] Pasividad y conformismo. Es otra causa la cual impide el avance del cristianismo. Falta de disciplina y preparación. Falta de disciplina y preparación.

[9:10] Desánimo y desobediencia. Desobediencia porque Dios no manda a predicar el evangelio. Y enemigos espirituales que aunque están de último, están dentro de los primeros lugares.

[9:24] Como dice la palabra, nuestra lucha no es con sangre ni con carne. Sino es contra Satanás y sus demonios que el Señor los reprenda. Pero todas estas cosas que yo les he mencionado, nosotros no las vemos en el apóstol Pablo.

[9:38] El apóstol Pablo predicaba la palabra en todo tiempo, en todo momento, en las prisiones. Sufrió múltiples prisiones, azotes, latigazos.

[9:50] Y él se mantenía fiel predicando la palabra. No tenía miedo. No tenía falta de fe. No era una persona disciplinada.

[10:00] Era una persona que escudriñaba la palabra. Nosotros no había desánimo en él. No había desobediencia en él. Nosotros tenemos un buen ejemplo en el apóstol Pablo.

[10:14] Pero sobre todo tenemos un mejor ejemplo en nuestro Señor Jesucristo. Quien dio su vida por nosotros. Nosotros vamos a continuar hoy predicando del libro de los Hechos. Este capítulo 25 es el que vamos a continuar predicando hoy.

[10:28] De los versículos del 6 al 12. Y vamos a ver en estos versículos. Vamos a ver el odio hacia Pablo. El odio hacia los cristianos. Y este libro ha sido de mucha bendición.

[10:41] Ustedes lo escuchan todos los domingos. Cuando cualquiera de nosotros va, se para aquí a predicar. Estamos viendo en los últimos capítulos a Pablo.

[10:54] El protagonista de estos últimos capítulos es el apóstol Pablo. Un hombre que se convirtió de perseguidor de cristiano a predicador de la palabra de Dios.

[11:07] Perseguía a los cristianos. Daba muerte a los cristianos. Daba autorización para que lo apresaran. Y se ha convertido ahora en un predicador de la palabra.

[11:20] En un predicador del evangelio. De ese evangelio. De esa buena noticia que nos salvó a nosotros. Ese evangelio que cuando nosotros lo escuchamos. El Espíritu Santo obró en nuestros corazones.

[11:32] Y nosotros pudimos ver la luz de Cristo. Podemos ver la luz de Cristo. Podemos ver lo maravilloso que es nuestro Señor Jesucristo. Pero siempre se levanta oposición cuando alguien está predicando el evangelio.

[11:44] Tenemos una lucha constante. Una lucha espiritual. Nosotros tenemos que se levantan acusaciones falsas. Y precisamente esto es lo que se ha levantado en contra de Pablo.

[11:54] Del apóstol Pablo. Lo han estado acusando de que predicaba en contra de la ley de Moisés. Cosa que era falsa. Que estaba predicando en contra del templo. Eso era falso.

[12:05] Lo estaban acusando de que estaba profanando el templo. Eso era falso. Lo acusaban de que estaba predicando en contra de la tradición judía. También era falso. Y lo estaban acusando de que estaba causando alboroto y disturbio en el imperio romano.

[12:19] Una acusación que era muy, muy peligrosa. Porque le podía costar su vida. Nosotros, para iniciar esta predicación de estos versículos que tenemos en el día de hoy.

[12:32] Tenemos que ver en el capítulo 24, el versículo 27. El último versículo del capítulo 24.

[12:44] Para nosotros tener una mejor idea y un mejor seguimiento de este versículo 25. Acuérdense que Pablo estaba ahora prisionero. Tenía ya varios años que estaba preso.

[12:56] El gobernador en ese entonces era Félix. Félix. Se acuerdan en predicaciones anteriores. Y Félix no había encontrado absolutamente nada.

[13:10] Nada para acusar a Pablo. Pero lo mantenía preso para mantenerse, para tener una buena relación, por así decirlo. Para congraciarse con la élite de poder de la nación de Israel.

[13:25] Específicamente con el Sanedrín, que era como la suprema corte de justicia. Y para mantenerse congraciado con el sumo sacerdote. Y lo mantenía preso. Imagínense esa injusticia.

[13:36] Pablo preso sin haber cometido ningún delito. Simplemente estaba preso porque estaba predicando el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Y precisamente así hay muchos hermanos.

[13:47] Y lo hemos estado diciendo insistentemente. Hay muchos hermanos en el mundo que están prisioneros por predicar el Evangelio de Cristo. Hay muchos hermanos que están en prisiones frías.

[13:59] En prisiones con una comida pésima. Sin agua potable. Si están enfermos no lo llevan a los médicos. Por predicar el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Estamos viendo los escándalos que están sucediendo en Nigeria.

[14:13] En el Congo. En Sudán. Lo que sucede en Corea del Norte. Lo que sucede en China. En la India. Y por hermanos que han mantenido fiel a la predicación de la palabra.

[14:24] Y vemos esta justicia contaminada por el pecado. Lo vemos en ese tiempo y lo vemos ahora. Una justicia que no tiene temor de Dios.

[14:35] Personas que no creen en Dios. Personas que no tienen temor de Él. Y en nuestro país por ejemplo hemos visto en las últimas semanas algo que sucedió.

[14:49] No voy a mencionar el nombre. Pero ustedes lo pueden encontrar en los periódicos. Una persona que estuvo acusado. Y estuvo prisionero casi como por dos años. Aproximadamente o quizás más.

[15:01] Imagínense esa persona preso por una falsa acusación. Inclusive la Suprema Corte de Justicia. Ordenó a la Procuraduría que le diera. Vamos a decir una compensación.

[15:14] No creo que sea la palabra adecuada. De 10 millones de pesos. Por el tiempo que él estuvo preso. Por el daño que él sufrió durante todo este tiempo. Eso ha sido un escándalo mis hermanos.

[15:26] Y así no solamente en mi país. Sino en diferentes países. Nosotros podemos ver. Esto como el pecado ha contaminado todo. La naturaleza gime.

[15:37] El pecado ha trastornado todo. Ha trastornado la naturaleza. Nos ha trastornado a todos nosotros. Por eso es que necesitamos de un Salvador. Necesitamos de un Redentor. Necesitamos de nuestro Señor Jesucristo.

[15:50] Y Pablo durante todo este tiempo prisionero. Y Félix no lo soltaba. Pero ¿qué pasó? Llegó el tiempo de que este procurador. Que tuvo una gestión desastrosa.

[16:02] Una gestión pésima estuvo. Fue sustituido por otro procurador. O por otro gobernador. Y cuando él fue sustituido. Félix.

[16:13] Él tenía aproximadamente. Pablo tenía aproximadamente dos años en prisión. Miren como dice en el versículo 27 del capítulo 24.

[16:25] Pero al cabo de dos años recibió Félix por sucesor a Polsio Festo. O sea, Félix lo quitaron del cargo. Y fue sustituido por Festo.

[16:40] Y miren como dice la última parte del versículo 27. Y queriendo Félix congraciarse con los judíos. Dejó preso a Pablo. Oigan esto mis hermanos.

[16:51] Qué dolorosa esta situación. Él quería congraciarse con los judíos. Con la élite política. Y la élite religiosa de la nación de Israel. Y por ese motivo dejó preso a Pablo.

[17:02] Y en el versículo 25. Haciendo un pequeño. En el capítulo 25. Empezando en el versículo 1. Haciendo un pequeño resumen. Dice. Llegando pues Festo.

[17:14] Festo. A la provincia. Él vino. Ya era el nuevo procurador. El nuevo gobernador. Subió de Cesarea a Jerusalén. Dice que subió. Porque había.

[17:24] Era como. Era como una. Era una zona un poco más alta. Jerusalén. Por eso aquí. Por eso es que aquí dice Lucas. Que subió de Cesarea a Jerusalén.

[17:35] Tres días después. O sea. Tres días después. De. De haber sido declarado. Como el gobernador. O el procurador. De la provincia. De Judea. Digo la provincia de Judea.

[17:46] Porque eso era lo que consideraba. El imperio romano. A sus colonias. Ellos consideraban. A Israel. Como una provincia. Acuérdense. Que el imperio romano. Era el imperio más poderoso.

[17:57] De ese entonces. Era un imperio súper poderoso. Que tenía control. Sobre muchísimos países. Y entonces. Una de las cosas. Que este imperio. Quería.

[18:07] Que el imperio romano. Quería. Que no hubiera. Disturbio. En sus colonias. No quería. Disturbio. No quería. Protesta. Sobre todo. Con la nación de Israel. Que habían tenido. Una experiencia.

[18:19] Habían habido. Revueltas. Habían. Y ellos. Era. Que eran muy difíciles. De controlar. Entonces. Por eso. Ellos querían. Que los gobernadores. Los procuradores.

[18:29] Hicieran una gestión. Donde. Mantuvieran el control. De la población. Donde haya paz. Como. Como. Popularmente decían. Y por eso. Esto. Por esto.

[18:39] Tres días. De haber asumido. El cargo. De haber asumido. La. De su posición. Como gobernador. Inmediatamente. Se dirigió. A Jerusalén.

[18:50] Que era la segunda. Capital. De esta nación. Judía. La segunda. La primera. Era. Cesarea. Y la. La segunda. Era. Jerusalén. Y dice. En el versículo 2.

[19:01] Y los principales. Y los principales sacerdotes. Y los más influyentes. De los judíos. Se presentaron ante él. Contra Pablo. Y le rogaron. Pidiendo contra él. Como gracia.

[19:12] Que le hiciese traer a Jerusalén. Preparando ellos. Una celada. Para matarle. En el camino. Wow. Que odio. Mis hermanos. Siguen. Se mantuvieron dos años.

[19:23] Con. Odiando. A Pablo. Dicen que el tiempo. Lo borra todo. Pero. Parece que aquí. No se ha cumplido esto. Acuérdense. Tiene dos años. En prisión.

[19:34] Los líderes. Vienen. Y se reúnen. Con el nuevo procurador. Y le piden. Que lo trasladen. De Cesarea. A Jerusalén. Y tenían un plan. Para matarlo.

[19:45] Asesinarlo. Durante el camino. Esto es increíble. Mis hermanos. Acuérdense. Que en versículos anteriores. Nosotros vimos. Que 40. Más de 40. Judíos. Hicieron un juramento.

[19:56] De no comer. Ni beber. Absolutamente nada. Hasta que no le hayan dado muerte. A Pablo. Posiblemente. Ya estos 40 hombres. O rompieron el juramento. O murieron. Porque.

[20:07] No le habían dado muerte. En dos años. A Pablo. Y ellos mantenían. Ahora era la cúpula. El poder religioso. Y militar. Mantenía. Con esta propuesta. De que lo.

[20:18] Lo trasladen. A Jerusalén. Para en el camino. Asesinarlo. Y matarlo. Básicamente. Porque predicaba el evangelio. Porque estaba predicando el evangelio de Cristo.

[20:29] Porque decía que nuestro Señor Jesucristo. Resucitó al tercer día. Porque decía que en ningún otro hay salvación. Solamente en Jesús. Que es nuestro Redentor. Jesús es nuestro Señor y Salvador.

[20:41] Y pensé así rápidamente. Me llegó así rápidamente a la mente. Cuando las hermanas Mirabales. Fueron a visitar a sus esposos. Que estaban detenidos.

[20:52] Por la tiranía de Trujillo. Cuando ellas regresaban a su casa. Que fueron interceptadas. Y fueron asesinadas brutalmente. Matadas a palos. Y todo eso. Y pensó en el pecado. El pecado que.

[21:04] Contaminando todo. Dañando todo. Por eso necesitamos. Predicar el evangelio. Por eso necesitamos. Llevar la esperanza. La buena noticia. De que Cristo murió por nosotros. De que Cristo dio su vida.

[21:16] Por nosotros. Y sigue diciendo entonces. En el. En el. Versículo. Cuatro. Festo parece que era un hombre. Que.

[21:27] Tenía ciertas. Ciertos valores. Miren como él le. Le respondió. Le dijo. Pero Festo respondió. Que Pablo estaba custodiado. En Cesarea. A donde él mismo partiría.

[21:38] En breve. Le dijo. No espérense. Él está custodiado. En Cesarea. Y yo voy para allá. Si alguno de ustedes. Quiere venir conmigo. Pueden venir conmigo.

[21:49] Y entonces. Los vamos a juzgar allá. Miren. Eso es lo que dice. En el versículo cinco. Dice. Los que de vosotros. Puedan. Dijo. Desciendan conmigo. Y si hay algún crimen.

[21:59] En este hombre. Acúsenle. Parece que era un hombre. Un hombre. Inicialmente. Un hombre justo. Él tenía poca experiencia. Y ellos querían. Aprovecharse.

[22:10] De esta situación. No tenía tanta experiencia. Como Félix. Y ellos querían. Tratar de envolverlo. En alguna. En alguna trama. Tratar de.

[22:20] De. De. Tratar de. Seducirlo. A que él haga. Lo que ellos querían. Lo que ellos tenían. Lo que ellos tenían. En mente. Entonces.

[22:32] En el versículo. Seis. Dice. Y deteniéndose. Entre ellos. No más. De ocho. O diez días. Venido. A cesarea. Al siguiente día.

[22:43] Se sentó. En el tribunal. Algunos judíos. Fueron. Con. Fueron. Con. Fueron. Con. Con. Y él. Duró. Aproximadamente. Dice que duró. Aproximadamente. De. Ocho. A diez días. Y al siguiente día.

[22:54] Inmediatamente. Fue. Él iba a ser el juez. Mandó a llamar. A. Mandó a llamar. A Pablo. Y algunos de los. De. De. De. De. De. De. De. De. De.

[23:05] De. De. De. Dice que cuando Pablo llegó, cuando éste llegó, lo rodearon los judíos que habían venido de Jerusalén presentando contra él muchas y graves acusaciones, las cuales no podían probar.

[23:24] Seguían presentando las mismas acusaciones, lo estaban acusando de haber predicado en contra de la ley de Moisés, lo estaban acusando de haber predicado en contra del templo, lo estaban acusando de haber predicado en contra de las tradiciones judías y lo estaban acusando de revoltoso, de que era un guerrillero, de que estaba levantando disturbios en la provincia de Judea.

[23:49] Todas estas cosas no se podían probar, todo esto era una falsedad, ellos no tenían testigos. Se habían mantenido dos años con esta acusación y no había ninguna prueba de esto que ellos estaban acusando a Pablo.

[24:07] Y vuelvo y le digo, mis hermanos, es increíble, dos años, dos años con ese odio, con ese rencor contra Pablo, que lo único que hacía era predicar el Evangelio.

[24:26] Cuando él estaba persiguiendo a los cristianos, cuando él estaba maltratando a los cristianos, no había ningún problema. Hablaban bien de él, lo protegían. Cuando estaba haciendo lo que el mundo quería que él hiciera, no había ningún problema.

[24:42] Y eso pasa muchas veces con nosotros. Cuando estamos complaciendo al mundo, cuando estamos complaciendo lo que el mundo quiere, cuando estamos siendo seducidos por el mundo, no tenemos aproximada, no tenemos ningún tipo de problema.

[24:57] Una vez que nos arrepentimos de nuestros pecados, que venimos a los pies de Cristo, vienen muchos problemas. Vienen falsas acusaciones, vienen rechazos, vienen decepciones, vienen familiares que se alejan, vienen amigos que se alejan.

[25:12] Esa es la realidad. Pero nuestro consuelo es que Cristo nos dice, no se preocupen, yo he vencido al mundo. Resistí al diablo y huiré de vosotros.

[25:26] Entonces, él no tenían pruebas, no tenían testigos para acusar a Pablo. Y en el versículo número 8, miren lo que Pablo dice.

[25:38] Alegando Pablo en su defensa, dice, ni contra la ley de los judíos, ni contra el templo, ni contra César he pecado en nada.

[25:49] Y es cierto, él no había pecado. Él no había pecado absolutamente en nada de esto. Pero, ¿qué pasa? El gobernador, el nuevo gobernador parece que se dio cuenta.

[26:02] El poder que tenía, la influencia que tenía el sumo sacerdote, la influencia que tenía el Sanedrín, que era como le dije en un principio, como si fuera la suprema corte de justicia.

[26:14] Y él quiso congraciarse con ellos. Y miren la propuesta que le hace a Pablo. Dice, pero Festo queriendo congraciarse con los judíos, respondiendo a Pablo dijo, ¿Quieres subir a Jerusalén y hallarse el juzgado de estas cosas delante de mí?

[26:32] Él está haciendo la propuesta. Pero, oye, Pablo, vamos a Jerusalén. Él quería congraciarse con la cúpula religiosa, con los líderes religiosos. Vamos a Jerusalén y yo voy a ser el juez allá.

[26:44] Yo mismo te voy a juzgar para ser juzgado de estas cosas. Y pero ya nosotros sabemos cuál era el plan de ellos cuando él estuviera en el camino, asesinarlo y quitarle la vida.

[26:57] Pero nosotros aquí vemos que Dios está en control de todas las cosas, mis hermanos. Dios está en control. No sé la situación que tú tienes. No sé por lo que tú estás pasando.

[27:10] Quizás algo que te está preocupando, algo que te está quitando el sueño. Pero nosotros vemos que Dios está en control. No se le escapa absolutamente nada a Dios. Lo que nosotros nos toma por sorpresa, Dios ya lo sabe de antemano.

[27:25] Dios es todopoderoso. Dios es súper poderoso. Y miren aquí, cómo ellos están planeando esto. Pero existe un Dios, un Dios que todo lo ve, que todo lo ve, perdón.

[27:39] Un Dios que todo lo escucha. Un Dios que escudriña los corazones. Y por eso, miren cómo le respondió Pablo. Cuando el procurador o el gobernador le hizo esa propuesta, que fueran a Jerusalén, Pablo le respondió y dijo, Ante el tribunal de César estoy donde debo ser juzgado.

[28:03] A los judíos, vuelve y le dice, no les he hecho ningún agravio, como tú sabes, muy bien. Él vuelve y le dice lo mismo. Yo no he cometido ningún delito.

[28:13] Yo no he cometido ningún pecado contra los judíos ni contra el César. Entonces, donde yo estoy es donde yo debo de ser juzgado. Y dice, porque si algún agravio, oigan la honestidad de este hombre, transformado por el poder de Dios, transformado por el Espíritu Santo, siendo guiado por el Espíritu Santo.

[28:33] Miren cómo él le responde. Porque si algún agravio o cosa alguna digna de muerte he hecho, no rehúso morir. Está diciendo, si yo he pecado, si yo he cometido algún agravio, si yo merezco la muerte por algún pecado que haya cometido, no rehúso morir.

[28:48] Entonces, dice, porque si algún agravio o cosa alguna digna de muerte he hecho, no rehúso morir. Pero si nada hay de las cosas de que estos me acusan, nadie puede entregarme a ellos.

[29:03] Posiblemente Festo vio que, él no encontró, vio que este hombre era inocente. Pero como lo estaban acusando de cosas relacionadas con su religión, posiblemente él quiso entonces, y además de eso, más importante para congraciarse con ellos, para complacerlo a ellos.

[29:20] Quizás él no sabía la trama que ellos estaban orquestando de quitarle la vida cuando fuera por el camino. Quizás por eso él quiso ir a Jerusalén para juzgarlo allá.

[29:31] Pero Pablo, guiado por el Espíritu Santo, dijo que no. La providencia de Dios, la misericordia de Dios, el Dios soberano, el Dios todopoderoso.

[29:43] Entonces, él le dijo que no. Entonces, miren, al final dice, sigue diciendo él, de las cosas que esto me acusan, nadie puede entregarme a ellos.

[29:55] A César apelo. Él apeló al César. ¿En qué consiste esto? ¿Por qué él apeló al César? Todos los ciudadanos judíos, perdón, todos los ciudadanos romanos, tenían, tenían, podían apelar durante un juicio.

[30:13] Esto significaba que podían, si no estaban de acuerdo cómo se estaba ejecutando el juicio, cómo se estaba llevando a cabo el juicio, ellos podían apelar y el juicio ser trasladado a la corte, a Roma directamente y ser juzgado inclusive por el propio emperador.

[30:32] No importa el proceso en el cual esté el juicio, no importaba el tiempo en el cual estuviera el juicio. Este privilegio fue establecido desde la fundación del Imperio Romano en el 509, donde los ciudadanos judíos podían apelar en el juicio.

[30:52] Y esto fue lo que hizo Pablo, porque vio que las cosas no estaban marchando bien. Él hizo esto porque vio que, era un hombre guiado por el Espíritu Santo, era un hombre con mucha sabiduría, con mucha inteligencia dada por Dios.

[31:07] Y por eso él apeló, él quiso que su juicio, él no estaba de acuerdo con que se lo llevaran a Jerusalén, porque sabía que ahí estaba la influencia de los líderes religiosos, donde las cosas quizás no se iban a manejar como él quisiera.

[31:26] Quizás ustedes, al igual que yo, uno se preguntará, pero ¿por qué él no apeló durante Félix? Era el gobernador. Él pudo haber apelado cuando Félix era el gobernador, pero no lo hizo.

[31:40] Félix no encontró ninguna forma de que él fuera culpable. Quizás él estuvo esperando que en algún momento Félix lo iba a dejar libre.

[31:51] Pero acuérdense que Félix también estaba esperando, de alguna manera, que él le diera dinero. Estaba esperando un soborno para libertarlo. Y se pasó el tiempo y pasaron aproximadamente dos años en esta situación.

[32:13] Entonces, entonces miren lo que sucede en el versículo número 12.

[32:24] Entonces, entonces Festo, habiendo hablado con el consejo, respondió, a César has apelado, a César irás. Como tú apelaste al César, entonces tú vas a ir a donde el César.

[32:41] Él necesitaba recolectar más informaciones. Él necesitaba hacerle un reporte antes de esto, para mandarlo ante esta apelación.

[32:52] Pero aquí vamos entonces. ¿Por qué tanto odio hacia Pablo? ¿Por qué un odio tenía dos años preso y seguían con las mismas acusaciones, con el mismo plan de asesinarlo, de quitarle la vida?

[33:11] Cuando él perseguía a los cristianos, no tenía, como le dije, tantos enemigos. Los líderes judíos eran sus amigos. No había tanta oposición.

[33:21] Lo protegían, los cuidaban. ¿Por qué tanto odio contra Pablo? ¿Por qué se levantaron tantas personas contra Pablo? ¿Por qué se levantan tantas personas contra los cristianos?

[33:34] ¿Por qué en Nigeria tantos cristianos están siendo asesinados? ¿Por qué en el Congo, en Sudán, tantos cristianos están siendo asesinados?

[33:46] ¿Por qué en México, que lo tenemos aquí cerca de nosotros, hay tantos cristianos asesinados? ¿Por qué en Colombia hay tantos cristianos asesinados?

[33:58] ¿Qué está sucediendo? ¿Qué está pasando? ¿Por qué este odio, mis hermanos? Y Juan, capítulo 15, del 18 al 19, no puede dar la respuesta de lo que está sucediendo.

[34:12] Y yo lo voy a leer. Este es la nueva traducción viviente. Juan 15, versículo 18 al 19. Dice, Si el mundo los odia, recuerden que a mí me odió primero.

[34:25] Ese es nuestro Señor Jesucristo hablando. Y miren cómo nos está diciendo nuestro Señor Jesús. No lo está diciendo a nosotros. Le está diciendo a todos esos cristianos que en estos momentos están siendo perseguidos, que están siendo asesinados, que están siendo martirizados, que están en prisiones frías, sin ningún tipo de comida, con agua que no es potable, que si se enferman no lo llevan a los hospitales.

[34:47] Miren cómo nuestro Señor Jesucristo nos está advirtiendo y nos dice, Si el mundo los odia, recuerden que a mí me odió primero. Si pertenecieron al mundo, el mundo los amaría.

[35:04] Wow. Y que el Señor nos está diciendo aquí ahora. Pero yo vivo en el mundo. Sí, nosotros vivimos en el mundo. Físicamente nosotros vivimos en el mundo.

[35:15] Pero nosotros no somos de este mundo. Dice, si pertenecieran al mundo, el mundo los amaría como a uno de los suyos. Wow, Dios mío.

[35:26] Pero qué cosa tan poderosa está diciendo nuestro Señor Jesucristo. Que si yo perteneciera al mundo, el mundo me amaría como a uno de los suyos. Pero ustedes ya no forman parte de este mundo.

[35:37] Ya no formamos parte de este mundo. Dice, yo los elegí para que salieran del mundo. Por eso el mundo los odia. Entonces ahora yo voy entendiendo. Se van aclarando mis pensamientos.

[35:50] Y estoy viendo por qué tanto odio contra Pablo. Por qué tanto odio contra los cristianos. Por qué tanto odio contra las iglesias. Entonces, pero yo necesito entender, Santo Dios.

[36:00] Qué significa pertenecer al mundo. Porque el Señor me está diciendo aquí, ya tú no perteneces al mundo. Pedro, ya tú no eres parte del mundo. Tú vives físicamente en este mundo. Pero tú no perteneces al mundo.

[36:13] Entonces, ¿qué significa que no pertenezco al mundo? ¿Qué significa que no soy parte de este mundo? Y ustedes, mis hermanos, tenemos que salir claros con esto. Pidiéndole al Espíritu Santo que nos ayude a entender esto.

[36:26] ¿Qué significa que no pertenezco al mundo? Esto significa que no debemos creer lo que el mundo cree. Wow. No debemos creer lo que el mundo cree.

[36:36] No debemos hacer lo que el mundo promueve. Debemos de vivir de acuerdo a la palabra de Dios. Wow. Lo voy a repetir de nuevo, mis hermanos.

[36:50] Esto significa que no debemos creer lo que el mundo cree. No debemos hacer lo que el mundo promueve. Debemos vivir de acuerdo a la palabra de Dios.

[37:02] Entonces, lo que esto me está diciendo, ¿qué promueve el mundo? ¿Qué el mundo promueve? Todas las cosas que Dios aborrece, el mundo promueve. El mundo promueve ser rico.

[37:13] No importa, haz lo que sea para ser rico. Las riquezas no son un pecado. Aclaro esto. Promueve la desunión. Promueve las guerras.

[37:25] Promueve la envidia. La codicia. Eso es lo que el mundo promueve. Porque el príncipe de este mundo es Satanás. Con sus demonios. Que el Señor lo reprenda.

[37:36] Entonces, eso es lo que nos está diciendo nuestro Señor Jesucristo. El mundo. No amemos al mundo. Ni las cosas del mundo. Pues quien ama al mundo, el amor del Padre, no está en él.

[37:49] Entonces, yo entiendo a Juan 15 ahora. Cuando Dios me dice que recuerde que yo pertenecía a este mundo. Pero él me sacó de este mundo. Y que por eso el mundo nos odia.

[38:00] Por eso el mundo nos rechaza. Por eso tú has visto que después que tú decidiste. Después que el Señor transformó tu corazón. Después que el Espíritu Santo te transformó. Que muchos de tus amigos te rechazan.

[38:12] Por eso tú ves que en el trabajo. Está un grupo reunido. Y tú estás solo en algún lugar. Cuando tú llegas, dejan de hablar. No te invitan a las actividades familiares.

[38:24] Mis hermanos. Nuestro Señor Jesucristo no lo está advirtiendo. Si eso mismo pasó con él, eso va a pasar con nosotros. Por eso nosotros estamos viendo lo que está sucediendo con Pablo. Y el mundo trata de seducirte.

[38:38] El mundo trata de seducirte. El mundo te seduce. Con su música. Con los valores que promueve.

[38:49] A través de los medios de comunicación. A través del celular, de la computadora, de la televisión. El mundo trata de seducirte. Y el mundo ha creado diversas y muchas religiones para relacionarse con Dios.

[39:08] Oigan esto lo que estoy diciendo, mis hermanos. El mundo ha creado muchas religiones para relacionarse con Dios. Para que nosotros nos relacionemos con Dios.

[39:19] Y todas estas religiones promueven la salvación por medio de obras. Dios mío, que podamos entender esto. Voy a volver a repetirlo. El mundo ha creado muchas religiones.

[39:31] Por eso vemos tantas religiones. ¿Cuántas religiones no hay? Yo tengo un libro de religiones. De todas las religiones del mundo. Y son muchas religiones. Porque el mundo quiere relacionarse con Dios.

[39:45] Y han creado todas estas religiones. Y promueven la salvación por obras. Pero Dios es quien ha establecido el Dios soberano.

[39:57] Es quien decide cómo nosotros nos vamos a relacionar con Él. Porque Él es soberano. Y Él es todopoderoso y Él está en control. Dios ha decidido cómo nosotros nos vamos a relacionar con Él.

[40:13] Y la forma que Dios ha decidido cómo relacionarnos con Él es a través de nuestro Señor Jesucristo. Es a través de nuestro Señor Jesucristo.

[40:26] Cuando nosotros nos arrepentimos de nuestros pecados. Cuando nosotros ponemos nuestra fe en Jesucristo. Esa es la forma que Dios ha decidido. Él es quien ha decidido cómo nosotros nos vamos a relacionar con Él.

[40:39] Y yo le dije. Estos líderes religiosos eran religiosos. Disculpen la redundancia. Eran religiosos. Que se estaban oponiendo a Pablo.

[40:53] Pero entonces. Y en este momento. En este tiempo. Nosotros vemos muchísimas religiones. Hay muchísimas religiones. Mis hermanos. Entonces.

[41:04] ¿Cuál sería la verdadera religión? ¿Cuál sería la verdadera religión? ¿Cómo yo me doy cuenta cuál es la verdadera religión? Entonces yo tengo que ir a la Biblia.

[41:16] Porque mi manual de vida es la palabra de Dios. Es la Biblia. Entonces yo voy a la Biblia. Mis hermanos. Y voy a Santiago capítulo 1 versículo 27.

[41:27] Y ahí yo me voy a dar cuenta. Mis hermanos. ¿Cuál sería la verdadera religión? ¿Cuál es la verdadera religión? Y miren cómo dice Santiago capítulo 1 versículo 27.

[41:40] Es bonita la palabra de Dios. Mis hermanos. A uno se le quita el sueño. El hambre. Todo. Miren cómo dice Santiago capítulo 1 versículo 27. Gracias Señor te doy por tu palabra.

[41:52] Gracias Padre. De todo corazón te doy por tu santa palabra. Miren lo que dice. La religión pura y verdadera a los ojos de Dios. Ya tengo la respuesta aquí. Tantas religiones que están.

[42:03] El mundo me trata de seducir con muchísimas religiones. Pero tengo que tener cuidado con lo que el mundo promueve. Con lo que el mundo me presenta. Entonces Dios dejó su santa palabra.

[42:14] Y miren cómo dice. La religión pura y verdadera a los ojos de Dios Padre. Consiste en ocuparse de los huélfanos y de las viudas en sus aflicciones.

[42:25] Y no dejar que el mundo te corrompa. Wow. Esa es la verdadera religión. Lo voy a leer de nuevo mis hermanos. La verdadera religión pura y verdadera a los ojos de Dios Padre.

[42:39] Consiste en ocuparse de los huélfanos y de las viudas en sus aflicciones. Y no dejar que el mundo te corrompa. La verdadera religión es una relación con Dios basada en la fe en Jesucristo.

[42:54] Gloria a Dios. La verdadera religión es una relación de Dios con Dios basada en la fe en Jesucristo. Yo soy el camino. La verdad y la vida.

[43:05] Nadie llega al Padre si no es a través de mí. Dice nuestro Señor Jesucristo. Wow. Gloria a Dios. Ya yo sé cuál es la verdadera religión. Esta es la verdadera religión. ¿Qué significa esto?

[43:16] Que consiste en ocuparse de los huélfanos y de las viudas en sus aflicciones y no dejar que el mundo te corrompa. Esto significa que yo debo de vivir para la gloria de Dios. Esto significa que yo debo de hacer las cosas que le agradan a Dios.

[43:31] Esto significa que yo debo de amar a Dios sobre todas las cosas. Esto significa que la Biblia debe de ser mi manual de vida. Cómo yo debo de comportarme. Y aquí dice ocuparse de los huélfanos y de la viuda.

[43:45] Esto simplemente está diciendo que nosotros debemos de ocuparnos por el que está en necesidad. Por el que necesita de nosotros. La verdadera religión es una relación con Dios basada en la fe en Jesucristo.

[43:57] Por eso es que yo le dije, mis hermanos. El mundo ha creado muchas religiones. Pero esta es la verdadera religión. El mundo está tratando de seducirnos. El mundo está tratando de mantenernos ocupados en las cosas del mundo.

[44:12] Preocupados por cosas, muchísimas cosas. Tenemos guerras. Tenemos hambre en muchísimos países. Tenemos problemas familiares.

[44:24] Tenemos medios de comunicación que no promueven los valores cristianos. Tenemos enemistades. A veces estamos preocupados.

[44:37] Nos levantamos entristecidos. Estamos preocupados por cosas que no debemos de estar preocupados. Porque el mundo trata de seducirnos.

[44:49] El mundo trata de alejarnos de Dios. Porque sabemos quién está detrás del mundo. Vuelvo y se lo repito. Satanás y sus demonios. Pero Dios nos ha dejado el alma para nosotros vencer el mundo.

[45:02] Nos ha dejado su palabra. Nos ha dejado el Espíritu Santo. El Espíritu Santo muere en nosotros y nos guía. Y nos lleva a todo juicio y a toda verdad. A veces estamos tristes.

[45:13] A veces no tenemos gozo. Admítanlo, mis hermanos. A veces nos levantamos preocupados. ¿Y qué será de mí cuando pasen unos años más? No tenemos gozo porque nuestro enfoque no está siendo el reino de Cristo y su justicia.

[45:30] Nos mantenemos a veces entristecidos. Nos mantenemos a veces preocupados. Porque no estamos haciendo tesoro en el reino de Dios.

[45:41] El gozo se nos está yendo. El gozo se nos está apagando. Porque no estamos enfocados en la palabra de Dios. No estamos enfocados en vivir para la gloria de Dios.

[45:53] No estamos enfocados para vivir para Él. Ya no vivo yo. Vive Cristo en mí. Ya no vivo yo. Y por eso es que nosotros tenemos que afianzarnos en la palabra.

[46:06] Nosotros tenemos que depositar nuestra fe y nuestra confianza en nuestro Señor Jesucristo. Que es nuestro Señor y Salvador. Y hago esta aclaración. Y lo digo así. Nuestro Señor y nuestro Salvador.

[46:19] En muchas religiones. En muchas religiones. Algunas podrían mencionar a nuestro Señor Jesucristo. Pero no es el Salvador y el Señor.

[46:30] Acuérdense de esto mis hermanos. María no salva mis hermanos. María era una mujer piadosa. Que Dios la usó. Pero María no salva mis hermanos.

[46:43] El único que salva es nuestro Señor Jesucristo. Mahoma no salva tampoco. El único que salva es nuestro Señor Jesucristo. Tengamos esto pendiente. Y ya nosotros podemos saber.

[46:54] Ya nosotros entendemos por qué este odio hacia los cristianos. Por qué esta adversión hacia los cristianos. Por qué no somos parte de este mundo. Entonces. Nosotros hemos visto.

[47:06] Así brevemente. El odio a los cristianos. Cuáles aplicaciones nosotros. Podemos sacar. De estos versículos. De esto que hemos escuchado. De la palabra de Dios que.

[47:16] Que hemos escuchado. Algunas sugerencias. Algunas aplicaciones. Como ustedes le quieran llamar mis hermanos. La primera es. ¿Por qué no predicas el evangelio? Nosotros estamos viendo.

[47:30] Que una de las causas. Que impiden que el evangelio avance. Es por el miedo. ¿Por qué tienes miedo. De predicar el evangelio. Si el Espíritu Santo muere en ti.

[47:41] Y el Espíritu Santo te va a respaldar. Predique el evangelio. No tenga temor. Si te rechazan. A Cristo lo rechazaron. Estamos viendo a Pablo. Que lo están rechazando.

[47:52] No tenga temor. Predique el evangelio. Predícalo en todo tiempo. En todo momento. Y yo se lo estoy diciendo a ustedes. Pero me lo estoy diciendo a mí mismo. A veces siento temor. De predicar el evangelio.

[48:02] Sí. Mis hermanos. Los pastores somos ovejas. Igual que ustedes. Por eso queremos que oren por nosotros. A veces tenemos debilidades. A veces tenemos temores. Prediquemos el evangelio.

[48:13] Se escucha mejor. Prediquemos el evangelio. Si tienes falta de fe. Pídele a Dios. Sigue el ejemplo de Pablo. Dos años en prisión. Dos años siendo en prisión.

[48:25] Imagínense todas las cosas que pasó. Se mantenía fiel a la palabra de Dios. Se mantenía fiel. Ya tú sabes cuál es la verdadera religión. Ya cuando tú salgas de aquí.

[48:37] Ya tú sabes cuál es la verdadera religión. ¿Y qué va a hacer con esto? Ya tú sabes cuál es la verdadera religión. Y tú tienes muchos familiares y amigos.

[48:49] Vecinos. Que están siguiendo una falsa religión. Y ahí viene un compromiso de tú predicarle el evangelio. Decirle que solamente en Cristo hay salvación.

[49:00] Que solamente Cristo salva. Que en ningún otro hay salvación. Que Dios ha establecido la forma en que nosotros nos vamos a relacionar con Él.

[49:12] Y es por medio de nuestra fe en nuestro Señor Jesucristo. Por medio de Jesucristo nosotros nos relacionamos con Dios. El Padre no envía al Padre. El Padre no envía al Hijo. El Hijo no envía al Padre. Y el Espíritu Santo transforma nuestros corazones.

[49:24] Ya tú conoces esto, mis hermanos y amigos. O mis hermanos. Ya tú conoces que la verdadera religión es esta. Entonces, ¿qué vas a hacer con esto?

[49:37] Vuelvo y te repito. María no salva. Mahoma no salva. Buda no salva. Nadie de ellos salva. Y menciono a María en este grupo. Que no debería quizá mencionarla. Porque fue una mujer virtuosa. Una mujer usada por Dios.

[49:49] Pero la realidad es esta. María no salva. Solamente en Cristo hay salvación. Acuérdense. Cuando nuestro Señor Jesucristo convirtió el agua en vino. Que podríamos usar esto. Lo que ella dijo.

[50:00] María dijo. Hagan todo lo que Él. Hagan todo lo que Él les diga. Hagan todo lo que Él les diga. Y solamente en Cristo hay salvación. Otra cosa, mis hermanos.

[50:13] Ya nosotros sabemos que el mundo nos seduce. El mundo trata de seducirnos. Porque sabemos quién está detrás del mundo. Y el Señor nos advierte que nos amemos al mundo.

[50:25] Ni las cosas que hay en el mundo. Porque el que ama al mundo. El amor del Padre no está en Él. ¿Y qué promueve el mundo? Los deseos de la carne. Los deseos de los ojos.

[50:37] ¿Qué promueve el mundo? No importa lo que tú hagas, te es rico. ¿Qué promueve el mundo? Promueve las guerras. Promueve la desunión. No promueve la solidaridad entre los seres humanos.

[50:51] Nosotros estamos viendo una guerra que tiene muchísimos años ya. Unos cuantos años. Entre Rusia y Ucrania. Matándose personas que son del mismo origen. Una guerra donde hay intereses económicos.

[51:05] Intereses de poder. Y este es el mundo. Y esto es lo que el mundo promueve estos valores. La enemistad. Nosotros estamos viendo en las escuelas como los niños. Ahora el principal problema es el bullying.

[51:17] Es donde los niños están siendo. Se hacen daño el uno al otro. Nosotros estamos viendo un mundo hostil a la palabra de Dios.

[51:27] Un mundo que a los malos le están llamando bueno. Y a los buenos le están llamando malo. Pero nosotros tenemos esperanza. Y esa esperanza está en Cristo Jesús. Cristo es nuestro Redentor.

[51:39] Cristo es nuestro Señor. Cristo es nuestro Salvador. ¿Qué tú vas a hacer con todas estas informaciones que tú tienes hoy? Que el Espíritu Santo te ha dado. ¿La va a guardar en un bolsillo? ¿Se te va a olvidar?

[51:52] ¿Qué vas a hacer, mis hermanos? Yo te pregunto. ¿Qué tú vas a hacer cuando tú llegues a tu casa y medites en la predicación de hoy? Y esté al lado tuyo una persona que está siguiendo una religión, una religión, perdón, que no es la verdadera.

[52:04] Una persona que tú veas que el mundo lo está seduciendo. Una persona que tú veas que tiene necesidad de Cristo. Tenemos un compromiso grande, mis hermanos. Y ese compromiso es predicar el Evangelio.

[52:20] Si no hubiese sido por el Evangelio donde nosotros estuviéramos hoy. Y yo recuerdo, para concluir, cuando estaba trabajando en esa clínica en New York, que uno de los pacientes me predicó el Evangelio.

[52:38] Y me siguió predicando el Evangelio. Y lo que el Evangelio ha hecho, Dios lo usó, porque Dios es quien salva, Dios usa en medio. Y lo que el Evangelio ha hecho en mi vida, lo que el Evangelio ha hecho en su vida, ha sido grandioso.

[52:54] Bendito sea el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Bendito sea por siempre nuestro Señor Jesucristo, quien se sacrificó y dio su vida por nosotros.

[53:05] Y hoy nosotros podemos ver con claridad quién es Dios. Vamos, mis hermanos, ahora. Padre amado, yo te pido, Señor, que estas palabras que tú nos has dado, queden grabadas en nuestros corazones.

[53:26] Yo te pido, Señor, que las personas que están aquí sin Cristo, tú uses esa palabra y transformes los corazones. Señor, que nosotros entendamos que sólo en Cristo hay salvación.

[53:41] Que nosotros no nos dejemos seducir por el mundo. Que nosotros, con este conocimiento que tú nos has dado de saber cuál es la verdadera religión.

[53:52] Que nosotros prediquemos el Evangelio y le hablemos a las personas sobre esto. Gracias, Señor, por este tiempo.

[54:03] Gracias, Señor, por tu palabra. Perdona nuestros pecados, Señor. Perdónanos en el nombre de Jesús. Amén. Perdónanos en el nombre de Jesús.