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[0:00] palabra. Bendito sea su nombre. Vamos a ir al libro de Mateo. Vamos a estar leyendo el libro de Mateo. Vamos a ir al capítulo número 6 y vamos a estar leyendo del capítulo, perdón, vamos a estar leyendo desde el versículo 25 al 34. Mateo 6, del 25 al 34. Por tanto, os digo, no os afanéis por vuestra vida.

[0:43] ¿Qué habéis de comer o qué habéis de vestir? Ni por vuestro cuerpo, ¿qué habéis de vestir?

[0:57] ¿No es la vida más que el alimento y el cuerpo más que el vestido? Mirad las aves del cielo que no siembran ni ciegan ni recogen en graneros y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane? Añadir a su estatura un codo? Y por el vestido, ¿por qué os afanáis?

[1:46] Considerad los lirios del campo como crecen. No trabajan, no hilan. Pero os digo, que ni a un salomón con toda su gloria, se vistió así como uno de ellos. Y si la hierba del campo que hoy es y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe?

[2:18] No os afanéis, pues, diciendo, ¿qué comeremos o qué beberemos o qué vestiremos?

[2:30] Porque los gentiles buscan todas estas cosas, pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Así que no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán, basta a cada día su propio mal. Vamos a orar.

[3:06] Gracias, Señor, por tu palabra. Gracias, Padre, por este precioso día, por tu amor, por tu misericordia. Permite, Señor, que esta palabra nosotros podamos aplicarla en nuestras vidas. Quítanos cualquier distracción, cualquier preocupación. Ayúdanos a mantenernos enfocados en tu santa palabra. Aquellas personas que nos visitan, si hay alguna persona que no conoce, que no te conoce, Señor, que venga en arrepentimiento y fe a nuestro Salvador, nuestro Señor Jesucristo. Amén.

[3:43] Se pueden sentar, mis hermanos y amigos que nos visitan. Esta es una sociedad caracterizada por la preocupación.

[3:56] Si nosotros nos ponemos a ver, esta sociedad moderna está caracterizada por la preocupación.

[4:07] La falta de las cosas materiales ha producido en nosotros, en los seres humanos, un afán, una preocupación constante.

[4:19] Nosotros podemos ver esto en el día a día. Vemos cómo las personas viven con esa ansiedad, con esa preocupación, con esa intranquilidad.

[4:37] Pero el Señor nos advierte, el Señor nos dice en su palabra que nosotros no debemos estar afanados, no debemos estar preocupados, no debemos estar con ansiedad.

[4:54] Que una persona que nos conozca de Dios esté con ansiedad, quizás nosotros podríamos entenderlo. Pero que un cristiano esté con ansiedad, esté con preocupación, a nosotros nos llama la atención.

[5:15] Y es precisamente estos pasajes que nosotros hemos leído, es para los cristianos. Y yo le voy, en el transcurso de la predicación, yo le voy a mostrar por qué yo estoy diciendo, o por qué la Biblia, básicamente la Biblia, dice que estos pasajes son para los cristianos.

[5:43] En el día de hoy nosotros vamos a ver tres puntos. Número uno, la causa de la ansiedad. Número dos, por qué yo no debo preocuparme, por qué no debo de estar en ansiedad.

[5:57] Número tres, la cura de la ansiedad. Esos tres puntos vamos a ver en el día de hoy. ¿Por qué, vamos con el número uno, la causa de la ansiedad.

[6:07] ¿Por qué nosotros vivimos constantemente con preocupación, con ansiedad, intranquilos, con falta de confianza?

[6:24] Y el Señor nos está diciendo en el capítulo, en el versículo 25, nos está diciendo que no nos afanemos por qué vamos a comer, qué vamos a beber, qué vamos a vestir.

[6:40] El Señor nos está diciendo eso. Pero aún así, somos ansiosos, estamos preocupados, estamos intranquilos.

[6:54] Y si ustedes recuerdan, si ustedes recuerdan en las prédicas anteriores, cuando me tocó predicar, el Señor decía específicamente en los versículos anteriores, decía que no podemos amar a dos señores.

[7:13] No podemos amar la riqueza ni amar a Dios, porque vamos a terminar aborreciendo a uno de esos dos. Entonces, muchas veces, el amor a las cosas materiales, el amor a las cosas materiales, el nosotros tener un enfoque distorsionado de cuál es la prioridad en nuestras vidas, nos lleva a nosotros y nos produce a nosotros ansiedad y preocupación.

[7:59] Me explico. Cuando nosotros vemos, cuando nosotros pensamos que la solución de nuestros problemas es el dinero, ahí hay un problema bastante serio.

[8:19] Cuando nosotros nos vemos, cuando nosotros no le damos prioridad a Dios, cuando nuestra prioridad no es Dios, entonces, nosotros vamos a tener tesoro en la tierra, no tesoro en el cielo, entonces vamos a tener una vida constantemente llena de ansiedad y de preocupación.

[8:49] Cuando nosotros vemos, el amor a las cosas materiales, el amor a las cosas de este mundo, es una causa frecuente de ansiedad.

[9:06] Cuando mi enfoque en la vida no es Dios, es una causa frecuente de ansiedad. Le voy a poner varios ejemplos.

[9:21] Si me dicen, mañana no puedes volver al trabajo porque está despedido, ¿cuál va a ser mi reacción? ¿Cuál va a ser nuestra reacción?

[9:33] Si perdemos el trabajo, ¿cuál va a ser nuestra reacción? Si me enfermo, ¿cuál va a ser mi reacción? ¿Cómo voy a reaccionar?

[9:44] Oh bueno, no voy a poder trabajar, no voy a poder mantener a mi familia. Si me dicen a mí, el domingo tú tienes que venir a trabajar, es obligatorio. ¿Cómo voy a reaccionar?

[9:58] Tienes que venir el domingo a trabajar porque es obligatorio. ¿Cómo yo reacciono ante esta situación? Si el dinero, si el dinero que tengo depositado en el banco, y el banco quiebra, y no me quedo sin dinero, ¿cómo voy a reaccionar ante esta situación?

[10:22] Muchas veces, nosotros depositamos nuestra confianza en algo en lo cual no deberíamos de depositar la confianza.

[10:41] Depositamos nuestra confianza en el dinero. Depositamos nuestra confianza en las cosas materiales. Depositamos nuestra confianza en las cosas terrenales.

[10:58] Y cuando nos sentimos con cierto bienestar económico, nos sentimos tranquilos. Y eso inclusive en el pueblo de Dios.

[11:09] Pero ¿por qué? Como dice nuestro Señor, ¿por qué yo no debo de preocuparme?

[11:24] ¿Por qué yo no debo vivir una vida de ansiedad? Una vida de preocupación. Una vida de falta de confianza. Este es el punto número dos. ¿Por qué no debo preocuparme?

[11:35] Y el Señor en el versículo 25, nos dice, nos da muchísimos ejemplos en el pasaje que nosotros hemos leído.

[11:48] Y lo primero que nos dice el Señor es, la vida es más importante que comida o bebida. El cuerpo es más importante que el vestido.

[12:01] Y que el Señor me está diciendo con esto. Que el Señor me está revelando con esto. La vida es más importante que comida o bebida.

[12:15] Nosotros fuimos creados por Dios. Nosotros, Dios es nuestro creador. Desde antes que Dios decidiera formar el mundo, ya Él nos conocía a nosotros.

[12:37] Dios es nuestro creador. Nos conocía desde antes de la fundación del mundo. Entonces, ¿ustedes piensan que Dios que nos creó a nosotros, o Dios creó al universo, dejó el mundo sin gobernar el mundo?

[12:55] Sin tomar cuidado por el mundo. Yo no decidí donde yo quería nacer. Yo no decidí donde yo quería nacer.

[13:05] Quizá, si hubiese sido el plan de Dios que yo hubiese nacido en el 1844, a lo mejor yo hubiese sido el que tiraba el trabucazo en la puerta del conde.

[13:18] Pero no. La decisión de Dios fue que yo nací, era en la fecha en que yo nací. Dios es soberano. La vida es más importante que comida o bebida.

[13:30] La vida es más importante que las preocupaciones que nosotros tenemos en el día a día. Dios es un Dios soberano. Dios no me creó, no nos creó a todos nosotros y se acostó a dormir.

[13:45] Dios gobierna la naturaleza. Dios gobierna todo. Por eso Él dice que la vida y el cuerpo es mucho más importante.

[13:56] Es mucho más importante que comida o bebida. Es mucho más importante que vestido. Pero otra cosa.

[14:09] Otra cosa que quiero decirle. Dios envió a su Hijo para que muriera por nosotros, por nuestros pecados.

[14:22] Dios enviará a su Hijo, que es Dios también, para que nosotros muriera, y murió Él por nuestros pecados.

[14:37] Dios, y nosotros nos estamos preocupando. Cuando yo me retire, ¿de qué yo voy a vivir?

[14:51] Estaré en quiebra Medicaid o Medicare cuando yo me retire. Tendré yo dinero cuando llegue a cierta edad. La vida es más importante que comida o bebida.

[15:08] La vida es más importante. El cuerpo es más importante que vestido. Dios es un Dios que toma cuidado de su creación. Un Dios que toma cuidado de su creación.

[15:23] Miren lo que dice en Salmo 37, 25. Dice, No he visto justo desamparado, ni a su descendencia mendigando pan. Ustedes nunca han visto a un cristiano.

[15:40] Ese ejemplo lo dio el hermano Vizcaíno. Yo lo voy a usar en el día de hoy. Ustedes nunca han visto, no han visto en primera plana que un evangélico, un cristiano se haya muerto por falta de comida.

[15:53] Nunca lo han visto ni lo van a ver. ¿Por qué vivimos con tanta preocupación, con tanta ansiedad, con tanta falta de confianza?

[16:07] Pero miren aquí, en el versículo 26, nuestro Señor Jesucristo nos pone otro ejemplo. Y nos dice, que miremos las aves.

[16:23] Las aves ni siembran, ni ciegan, ni tienen granero donde almacenan sus alimentos. Y ellas comen todos los días. Ella comen todos los días.

[16:36] Desde que usted despierta a las 5 de la mañana, usted la escucha a ella. Entonces, eso también es bueno que este ejemplo, Dios es sabio, que Él puso este ejemplo.

[16:46] El hecho de que yo le diga aquí en el día de hoy que no me preocupe, no significa que nos vamos a quedar de brazos cruzados. Nosotros tenemos que hacer lo que Dios manda. Dios dice que debemos de trabajar con el sudor de nuestra frente, nos vamos a mantener.

[17:01] Y ese es un buen ejemplo. Las aves desde las 5 de la mañana, ellas están, están buscando sus alimentos. Y Dios la alimenta. Y miren lo que dice, vuestro Padre Celestial, por eso yo le dije que este pasaje es para creyentes.

[17:20] Vuestro Padre Celestial las alimenta. Si Dios, si Jesús me está diciendo, vuestro Padre Celestial, eso significa que este pasaje es para nosotros los cristianos, para los creyentes, las personas que creen en el Señor.

[17:39] Porque quienes son hijos de Dios. Aquellos que hemos sido adoptados por medio de la sangre de Jesucristo. Somos hijos de Dios. Entonces, dice el Señor, en ese versículo 26, no valéis más que ella.

[17:56] Si Dios alimenta las aves, imagínense a nosotros, que fuimos creados a imagen y semejanza de Dios. ¿Por qué nos preocupamos tanto?

[18:10] Nosotros vamos a verla, ¿por qué nos preocupamos? ¿Por qué nos preocupamos tanto? ¿Por qué las cosas terrenales de este mundo nos quitan el sueño, nos quitan la concentración?

[18:26] Si tenemos un Dios todopoderoso que nos creó, que toma cuidado de su creación. ¿Por qué nos preocupamos? Entonces, en el versículo 27, el Señor dice que nosotros no le vamos a añadir ni un codo a nuestra estatura.

[18:51] Pero aquí lo que significa es básicamente que nosotros no le vamos a añadir ni un día más a nuestras vidas. O sea, cuando Dios decida mandarnos a buscar, olvídense, donde quiera que nosotros estemos, ese día nosotros nos vamos a morir.

[19:13] El día que Dios me mande a buscar, yo puedo estar en una bóveda cerrado. Y si ese es el día que Dios me va a mandar a buscar, nada lo va a impedir.

[19:24] Por eso, eso es lo que significa aquí cuando dice ¿Quién podrá añadir a su estatura un codo? Traducido del griego, esta parte lo que significa es no podrá agregarle un día más de vida a tu existencia.

[19:37] Nosotros vinimos aquí, fuimos creados por Dios y algún día Él nos va a mandar a buscar. ¿Por qué afanarnos tanto? Entonces, Él pone otro ejemplo, nuestro Señor.

[19:51] Dice, los lirios del campo. Miren las flores, cómo la vistió, la belleza de las flores. Dice que ni a un Salomón en todo su esplendor se vistió así como los lirios del campo.

[20:08] ¿Por qué preocuparnos por vestido, por lo que vamos a comer, por lo que vamos a beber? Si a la hierba la vistió así, dice en el versículo 30, no hará mucho más por vosotros.

[20:22] o por nosotros. Y dice algo aquí, hombre de poca fe. Y estamos llegando, estamos viendo ya razones concretas por las cuales nos preocupamos y nos mortificamos.

[20:41] hombres de poca fe. Esto, al igual que cuando leímos Padre Celestial, me dice que estos pasajes son para creyentes.

[20:54] Son para creyentes. Porque, ¿quién tiene fe? Somos nosotros, los cristianos, los que creemos en nuestro Señor Jesucristo.

[21:05] Pero, viene, ¿qué significa hombre de poca fe? Mi Señor dice, hombres de poca fe.

[21:19] Significa que tiene una fe reducida. Una fe reducida. Y hay una, la forma como lo definió el pastor Martin Lloyd Young, me pareció interesante y por eso se lo voy a mencionar aquí.

[21:35] Dice, tener una fe reducida es pensar que Dios me salvó solamente. solamente. Y pensar que Dios no tiene control, no tener una postura bíblica del Dios de la Biblia.

[21:59] No pensar que Dios es un Dios soberano, que tiene control de todas las cosas. Desde la fundación del mundo, desde antes de la fundación del mundo, Dios sabía que en el día de hoy yo iba a predicar de este tema.

[22:21] Desde antes que fundara el mundo, Dios sabía que yo iba a predicar de este tema. Entonces, el hombre de poca fe tiene una visión reducida, una falta de conocimiento del Dios de la Biblia.

[22:37] Y por eso se preocupa. Y por eso vive triste. Y cualquier problema le quita el sueño. Y vive con ansiedad y con preocupación.

[22:51] Dios es un Dios soberano, un Dios que tiene control de todo. Si Dios alimenta a la sabe, no me va a alimentar a mí. No nos va a alimentar a nosotros.

[23:03] Que fuimos creados a imagen y semejanza de Dios. Que envió a su Hijo a que muriera por nuestros pecados. A que muriera por los pecados de la iglesia, por los pecados de los que van de ser salvos.

[23:15] Pero, miren lo que dice, le voy a leer esto.

[23:29] En el versículo 31, el 32, perdón, dice, porque los gentiles buscan todas estas cosas, pero vuestro Padre Celestial sabe que tenéis necesidad de estas cosas.

[24:00] Cuando dice aquí, los gentiles buscan todas estas cosas, se está refiriendo a los no creyentes, a los que no conocen de Dios.

[24:14] ¿Qué dice este pasaje, este versículo? En buen dominicano, las personas que no conocen de Dios, que no creen en Dios, viven con estas preocupaciones.

[24:32] Y la segunda parte de ese versículo dice, pero vuestro Padre Celestial sabe que tenéis necesidad de estas cosas.

[24:47] Entonces, hemos visto la causa de la ansiedad. Hemos visto por qué no debemos de preocuparnos, por qué no debemos vivir con afán, por qué no podemos vivir preocupados constantemente con esa falta de confianza.

[25:04] Entonces, ¿cuál es la cura? para las preocupaciones, para la ansiedad. La cura está en el versículo 33.

[25:21] Dice, mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia y todas estas cosas os serán añadidas.

[25:33] buscad primeramente el reino de Dios y su justicia y todas estas cosas serán añadidas. Entonces, la pregunta es, ¿cómo yo busco el reino de Dios y su justicia?

[25:49] ¿y cómo esto se va a reflejar en mi vida? El reino de Dios y su justicia yo lo busco estudiando su palabra, estudiando la Biblia, teniendo una vida santa, una vida en santificación, predicando su palabra, predicando a mis familiares, a mis amigos, a las personas que yo conozco, leyendo día a día su palabra y reflexionando en ella.

[26:37] Entonces, cuando yo hago esto, cuando yo mi prioridad no son las cosas terrenales de este mundo, no son las cosas pasajeras de este mundo, sino que mi prioridad son las cosas de Dios.

[26:54] Cuando yo no hago tesoro en la tierra, sino que hago tesoro en el cielo. ¿Cómo se va a reflejar esto? ¿Cómo se va a reflejar en mi vida?

[27:09] Que cuando a mí me dicen, tú tienes que trabajar el domingo, le digo, espérate, el domingo es el día del Señor. Como hizo un miembro de nuestra congregación, que le dijeron, tú tienes que trabajar el domingo, y ella dijo, no, yo el domingo voy a la iglesia.

[27:29] Cuando llega cualquier situación difícil en mi vida, cualquier situación difícil que llegue, por difícil que llegue en mi vida, yo no me afano, no me produce ansiedad, no estoy preocupado, porque mi confianza es el Señor, mi confianza es Dios.

[27:50] Cualquier situación que llegue en mi vida, mi confianza es Dios. Yo voy a descansar en Dios, Él es mi todo, Él es mi soporte.

[28:07] voy a dar una pequeña conclusión y voy a dar unos cuantos puntos de aplicación.

[28:24] Nosotros no debemos preocuparnos, porque nosotros tenemos un Dios soberano, un Dios que tiene control de su creación.

[28:37] Si Dios alimenta las aves del campo, imagínense nosotros que somos hijos de Dios, nosotros que fuimos creados a imagen y semejanza de Dios y su Hijo murió por nuestros pecados.

[28:59] nosotros no debemos estar preocupados por las cosas de este mundo. Nuestra preocupación tienen que ser las cosas de Dios.

[29:14] Dos aplicaciones solamente voy a hacer. Una para las personas que ya han conocido, que conocen al Señor y una aplicación para las personas que no conocen del Señor, las personas que no han conocido del Señor, si por casualidad hay alguno que no conoce del Señor.

[29:44] Hermanos, si nosotros nos estamos preocupando por las cosas terrenales, por las cosas materiales de este mundo, si somos afectados por sentimientos de preocupación, de ansiedad ante cualquier adversidad en la vida, tenemos que tener una mayor comunión con Dios.

[30:13] Tenemos que buscar una mayor intimidad con Dios. Tenemos que tener un mayor conocimiento de Dios, del Dios bíblico.

[30:26] Tenemos que conocer el reino de Dios, tenemos que hacer tesoro en el cielo. Si nosotros tenemos, si estamos teniendo ese problema de ansiedad, de preocupación, miren como el Señor dice, hombres de poca fe.

[30:46] Tener una mayor comunión con Dios, buscar más a Dios. Las personas que no visitan, que no conocen de Dios, que no han conocido del Señor, tú también vives en ansiedad y preocupación.

[31:09] Y es mucho más difícil, es imposible sin Dios, enfrentar la ansiedad, la preocupación, los afanes de la vida.

[31:25] Es nuestro deseo como iglesia y está en nuestras oraciones que si alguien nos está visitando y no conoce al Señor, que vengan a arrepentimiento y fe porque solamente en Jesucristo hay salvación.

[31:46] Solo en Cristo hay salvación. Vamos a orar. Señor, te damos gracias por tu amor, por tu misericordia, por tu bondad.

[32:01] Permite, Señor, que estas palabras que hemos predicado en el día de hoy podamos aplicarlas en nuestras vidas y que tengamos vidas más consagradas a ti, que busquemos verdaderamente de tu presencia.

[32:17] Permite, Señor, que las personas que no te conocen puedan venir en arrepentimiento y fe. A ti, Señor, que eres nuestro salvador. Solo en ti hay esperanza, solo en ti hay paz, solo en ti hay sabiduría y justicia, solo en ti hay amor.

[32:35] Gracias, Señor, porque me ha dedicado tu palabra. Gracias, Padre, esta gran bendición. Bendito sea tu nombre, en el nombre de Jesús. Amén.

[32:48]  Están en la escuela bíblica.